lunes, 10 de julio de 2023

Comunicado del Partido Inexistente

    Ante el manifiesto firmado por ciento ochenta personalidades del mundo de la cultura del espectáculo y del espectáculo  de la cultura tales como Almodóvar, Rozalén o Buenafuente animando a los ciudadanos y a las ciudadanas a ir a los colegios electorales el 23J como está mandado a depositar sus votos contra la “ofensiva conservadora”, al grito de “A las urnas, ciudadanos”, que tanto recuerda el “Aux armes, citoyens” de la beligerante Marsellesa, y que viene así a equiparar las “urnas” con las “armas”, como si aquellas fueran, al igual que estas según el himno nacional francés, medios o instrumentos para alcanzar la inalcanzable libertad, el Partido Inexistente comunica que no ha firmado ni firmará nunca dicho manifiesto.

   El mentado manifiesto señala que nos hallamos ante una ofensiva conservadora (un pasito patrás) contra la que proponen su contraofensiva progresista (un pasito palante): acudir “masivamente a las urnas” porque no es momento de retrocesos, sino de avances, siempre que esos votos sean para los partidos del progreso. 
 
 Tanto los partidos conservadores del pasito patrás como los progresistas del pasito palante son partidarios de que depositemos masivamente nuestros votos en unas urnas que no dejan de ser papeleras, fortaleciendo así el régimen democrático alternante de dominación vigente.  
 
Se enfrentan unos y otros en los comicios electorales como si estuvieran en una pista de baile, o en el bamboleo del autobús zaragozano que le inspiró la canción de un dos tres, un pasito palante, María, un dos tres, un pasito patrás a Enrique Martín Morales, más conocido como Ricky Martin.
 

  Consideramos, desde el Partido Inexistente, que la oposición entre conservadores y progresistas, como la subyacente de derechas e izquierdas, es falsa. Como escribió Adorno, "la libertad consiste no en elegir entre blanco y negro, sino en escapar de toda alternativa preestablecida", y para eso, decimos nosotros, no hay que elegir, hay que huir del juego de las falsas elecciones.  

    El Estado necesita simultáneamente conservarse progresando y progresar conservándose. El  régimen democrático dominante se fundamenta en la alternancia de ambas necesidades: conservar el sistema tal como es y aplicarle medidas de mejora -parches- en el sentido de progreso, es decir, de avance garantizando así su permanencia. 


     Ambos, conservadores y progresistas, alimentan el mismo Régimen que por una parte aspira a salvaguardarse pero por otra sabe que no puede hacerlo si no es progresando, por aquello de que necesita cambiar para seguir siendo igual (mutatur ne uarietur), según el célebre aforismo de Giovanni di Lampedusa: Se vogliamo che tutto rimanga com’è, bisogna che tutto cambi ('Si queremos que todo permanezca como está, es necesario que todo cambie').

    Ante esta situación, el Partido Inexistente (PI) quiere denunciar que tanto los unos como los otros mienten y que mintiendo colaboran con el sistema: porque gobernar es mentir, es decir, ocultar la verdad. Los unos quieren conservar el Régimen sin ponerlo en cuestión, los otros quieren que progrese, es decir, que mejore, lo que no cuestiona su existencia, sino solo su funcionamiento, fortaleciéndolo al fin y a la postre. 


    La mejora de las condiciones laborales no acaba con la explotación laboral del trabajo asalariado, sino que la justifica de alguna manera haciéndola más llevadera al otorgarle un aspecto más humano, o como prefieren algunos, más humanitario, cuando el problema es el sistema mismo, el Régimen inhumano. 

domingo, 9 de julio de 2023

Escuela de la Guerra

    El pasado 29 de junio la ministra de Defensa y el Jefe de Estado Mayor del Ejército de Tierra del Reino de las Españas presidieron la celebración de la quincuagésimo novena edición de los Premios Ejército 2023, que tuvo lugar en la EGE (Escuela de Guerra (sic, literal, así se llama) del Ejército de Tierra) en los Madriles. 
 
    Según la presentadora, la EGE es un "centro docente militar de perfeccionamiento donde se imparten enseñanzas correspondientes a las especialidades complementarias y los cursos de más alto nivel del Ejército de Tierra".  
 
    Omitimos por delicadeza, como siempre que podemos, los nombres propios de la ministra, del JEME y del resto de la cúpula del ejército por insignificantes o poco significativos. Lo importante no es la persona que ocupa el cargo, sino el cargo que ocupan las personas y a ellas las ocupa: los nombres propios vienen y van, los cargos permanecen: principem mortalem, rem publicam aeternam esse
 
Alumnos a las puertas de la Escuela de Guerra del Ejército
 
    Esta gala militar, que se celebra todos los años desde 1945, cuyo objetivo es propiciar la "creación artística y literaria" referida a las Fuerzas Armadas, así como el conocimiento y divulgación de lo que llaman 'cultura de Defensa', suele pasar sin pena ni gloria para la sociedad civil, pero este año se ha producido un hecho singular que ha dado la vuelta a la tortilla porque, como veremos, les ha salido el tiro por la culata, ridiculizando la citada cultura defensiva que resulta al final ofensiva porque ofende al sentido común al mostrarla tal y como es, lo que ha indignado a algunos militares y ex militares como han manifestado en las redes sociales por la rechifla que suponía del propio estamento militar del que forman parte. 
 
 
    Algunos han hablado de "vergüenza, ridículo, deshonra, esperpento...". ¿De qué demonios se trataba? Pues de un número de ballet de una coreógrafa, actriz y bailarina, muy conocida en sus círculos íntimos, en la que ocho bailarines y bailarinas, ataviados y ataviadas con uniformes reglamentarios del ejército español con la enseña nacional, portando armas invisibles, hacían sin querer una parodia de la instrucción militar, ridiculizando la milicia. 
 
  
    No sonaron de fondo los acordes rimbombantes de una marcha marcial de música militar ni la fanfarria de un himno de ardor guerrero, sino una conocida canción pop del cantante negro que quiso ser blanco, Michael Jackson, acusado de pederastia, que acabó suicidándose probablemente con una sobredosis de barbitúricos. El tema, poco marcial, se titulaba They Don't Care About Us, lo que en román paladino quiere decir “No se preocupan de nosotros” o “No les importamos en absoluto”. El título de esta canción alude en particular a la policía y, en general, a las fuerzas armadas, y la letra habla contra la brutalidad de dicho gremio, habiendo adquirido relevancia a raíz de las protestas de BLM “Black Lives Matter”.
 
    Sin duda a la mayoría de los presentes, tras los aplausos finales de rigor, les pareció que la puesta en escena de aquel ballet era poco, por así decirlo, seria, nada solemne ni apropiada para la celebración de los premios de las Fuerzas Armadas, por lo que podía resultar y de hecho así lo creyeron algunos una ridícula pantomima surrealista que a fuerza de imitar la realidad de la disciplina militar y la formación e instrucción de una tropa mercenaria o masa obediente que cumple al unísono órdenes ejecutivas, acababa ridiculizándolas y haciendo una sátira que quizá no pretendía serlo, un número en definitiva contraproducente.
 
    La coreografía, como puede apreciarse en el vídeo adjunto, no tiene desperdicio: armas imaginarias invisibles, órdenes ejecutivas (¡Firmes, ar!), pasos marciales, piruetas y danza modernista. 
 

    Puede compararse la  susodicha coreografía militarista con la de  They don't care about us, un vídeo que ofrece una aceptable traducción al castellano de la letra de la canción, y se entenderá el cabreo no buscado de algunos militares.

  

sábado, 8 de julio de 2023

Mensajes breves y teletipos

Los gobiernos que nos han arrebatado y secuestrado dos años de vida son los mismos que ahora nos arrojan a una tercera guerra universal de todos contra todos. 

 Ciento ochenta personalidades animan a la gente a votar en las elecciones generales con el lema 'Ciudadanos, a las urnas', cual marsellés aux armes, citoyens.

 En la lengua del Imperio no hay un pronombre respetuoso como nuestro 'usted', generalizándose el tuteo y perdiéndose la distancia en el trato interpersonal.
 
La generación selfi es la juventud que se caracteriza por autorretratarse siempre con la sonrisa a flor de labios a fin de disimular hipócritamente su tristeza.
 
  La vicepresidenta que aspira a presidenta propone una 'herencia universal' de veinte mil euros a los jóvenes para emprender y formarse catapultándose al futuro.
 
Antaño, antes de 1983, lo que no salía por la televisión no existía, hogaño lo que no está en interné es lo que no existe, y no existe nada fuera de interné.

 "Todo lo que no trasmito no existe"

 El enemigo del pueblo es el régimen político que usurpa su nombre so capa de representarlo y defenderlo, la democracia, que es lo mismo que decir la demagogia.
 
El Consejo de Ministros y de Ministras decidió el 4 de julio de 2023 poner fin a la falsa emergencia sanitaria del virus monárquico y coronado en las Españas.
 

  Hasta hace cuatro días exactamente podíamos, según los expertos, infectar o infectarnos sin mascareta en hospitales, farmacias, geriátricos y centros de salud. 

 Por fin el BOE pone fin oficialmente a la espuria crisis sanitaria anulando la obligatoriedad de las mascarillas en los recintos farmacéuticos y hospitalarios.
 


viernes, 7 de julio de 2023

Pareceres XXIV

116.- Ni caso. Durante mucho tiempo la información escaseaba y era un bien más difícil de conseguir que el oro, pero hoy día hay un apabullante superávit. En la Red, desde luego, es lo que más abunda: información, de hecho es casi lo único que hay. Hay quien dice que es tan necesaria como el aire y el agua. Pero el aire y el agua son necesarios para vivir. La información ¿para qué es necesaria? Algunos dirán que para saber lo que pasa. Pero es mentira. Las informaciones son necesarias para meternos el miedo en el cuerpo y para distraernos. Igual que el aire y que el agua, que están cada vez más contaminados en el planeta azul, la información también está poluta, manipulada, sesgada; por lo que su abundancia se convierte en asfixiante: no es una riqueza de la que podamos enorgullecernos, sino un motivo de grave preocupación: un un tumor cancerígeno que pretende aniquilarnos insensibilizándonos ante lo que pasa, porque logra que nos desentendamos de “lo que pasa” y nos preocupemos por cosas que no nos interesan, que ni nos van ni nos vienen, para que así seamos incapaces de ver lo que tenemos delante de nuestras propias narices -eso y no otra cosa es "lo que pasa"-, pues vemos empantallados como estamos, en su lugar, las pantallas que nos ponen a modo de aquellas orejeras que les plantaban a los asnos para que caminaran siempre adelante en la misma y prefijada dirección. ¿Es bueno, pues, estar informado? Para nada. No sólo no es bueno, es perjudicial para la salud física y mental. Nuestra tarea, por lo tanto, es librarnos de la información, desinformarnos, no hacer caso de lo que nos cuentan.

 

117.- Departamento de Orientación: La existencia de un Departamento de Orientación en los centros educativos españoles de ESO (Educación Secundaria Obligatoria) demuestra la gran desorientación que, promovida desde arriba, existe por abajo. Nunca ha habido más información que ahora. Vivimos en la sociedad de la información. Por eso mismo, porque nadamos en el mar superabundante de la información, todos estamos fundamentalmente desinformados, desorientados, náufragos sin brújula ni norte a la deriva.

118.- Trabajo infantil: La crítica que algunas almas piadosas y caritativas hacen al trabajo asalariado se agota en el llamado trabajo infantil. Estos moralistas se escandalizan de que a niños de seis y de siete años se los obligue a trabajar en la cosecha del algodón o en las minas. Tiene razón, es escandaloso, pero no porque se trate de niños, sino porque el trabajo, en sí, es un castigo de Dios que clama al cielo.

  

Concierto 5 en D-minor de Scarlatti (Café Zimmermann)

 119.- ESO (Abreviatura de Educación Secundaria Obligatoria del sistema educativo español). La obligatoriedad de la enseñanza hasta los 16 años parece, por un lado, un logro social de las clases populares pero, por otro, supone una nueva institución penitenciaria, un nuevo servicio militar obligatorio que se cierne sobre ellas, y que no admite objeción de conciencia: la mayor intromisión del Estado en la vida de la gente, que convierte a los niños entre los seis (y pronto se rebajará la edad a los tres) y 16 años (y ya se habla de hacerla obligatoria hasta la mayoría de edad a los 18) en cohortes, subdivisión de la legión romana, de reclutas forzados. Quizá deberíamos hablar de manípulos de reclutas forzados. Era el manípulo una unidad menor de la legión romana, unidad operativa y manipulable, es decir, manejable. La escuela siembra aversión en los niños por el saber que transmite, a los que infantiliza, psicologiza, y hastía, matando la curiosidad innata, y generando fracaso y sumisión.

 

Un lema electoral que no pasa de moda: el cambio.
 

120.- ¿Cambio o recambio? Otra vez la zanahoria inalcanzable del cambio (change en la jerga del Imperio) delante del borrico sirve como eslogan o grito de guerra político para alimentar la esperanza, esa virtud teologal, de un electorado que acabará defraudado cuando compruebe, una vez finalizada la euforia etílica de la victoria, que el único cambio que se ha producido en las altas esferas de la política y la economía es el nominal, y que el voto era un vale canjeable directamente por la desilusión. Poco importa que el presidente sea másculo o fémina, blanco o negro, con tal de que ocupe la presidencia una vez que ha quedado vacante el trono. Y en eso no hay cambio que valga. Ya lo dice el refrán chino que Felipe González –que llegó al poder enarbolando la bandera del cambio y que no cambió nada sustancial- importó de uno de sus viajes de la China comunista: gato blanco o gato negro da lo mismo, son canjeables, lo que importa es que mate ratones. Cámbiese el gato por el presidente, y los colores “blanco” o “negro” por “izquierdas” o “derechas”, progresistasconservadores o viceversa, no importa. Lo que importa es que sea gato, es decir, que sea presidente, o lo que es lo mismo, que mate roedores. ¡Pobrecitos de nosotros, los ratones!

jueves, 6 de julio de 2023

Adiós a la bella Lugano

    Los anarquistas italianos se despedían de la bella Lugano a finales del siglo XIX cantando la canción Addio Lugano bella, cuya melodía es de origen popular y cuya letra se debe a Pietro Gori, que la escribió en 1895 en Suiza. 
 
    Pietro Gori fue acusado del asesinato, que no había cometido, del presidente de la república francesa Sadi Carnot. El asesino había sido, al parecer, el también anarquista italiano Sante Gerome Caserio. Era este Caserio uno de aquellos anarquistas que creía que en la lucha contra los gobiernos eran lícitos la dinamita, la bomba y el puñal, y de los que creían, equivocados, que matando a la persona del tirano se acababa con la tiranía. Fue condenado a muerte y murió en la guillotina. Sus últimas orgullosas palabras dirigidas a sus verdugos fueron: “Si queréis mi cabeza, tomadla”. 
 
 
    En el texto de Pietro Gori se habla de los oprimidos, a los que se les desea la paz, y de los opresores, a los que se les declara la guerra. En la actualidad no está tan claro quiénes sean los unos, los buenos, y quiénes los otros, los malos, porque todos somos a la vez victimarios y víctimas, opresores y oprimidos de nosotros mismos en primera instancia y, en segunda pero no menos importante instancia, también de los demás. 
 
Desterrados sin tregua, vamos de tierra en tierra / a predicar la paz y a promover la guerra: / la paz al oprimido, la guerra al opresor. 
 
    Pero sigue siendo válida esa declaración de paz y de guerra: paz a los hombres y guerra a las instituciones, es decir, a las ideas, a la Realidad, en la que se incluye, cómo no, la institución del individuo o átomo personal, nuestra propia persona. Y por eso seguimos cantando “Adiós, Lugano bella…” y despidiéndonos en nuestro destierro como caballeros andantes de los compañeros sin nombre que se quedan allá y de las montañas blancas de nieve. Leamos, si no podemos oírla, la letra traducida de esta bella canción. Que no se pierda una nota. 
 
 
  Bella Lugano, adiós, oh dulce tierra pía, / expulsados sin culpa se van los anarquistas, / y se marchan cantando con todo el corazón. 
 
Y es por los oprimidos y los trabajadores / que nos encadenaron como a los malhechores, / pero y es nuestra idea sólo la del amor. 
 
Compañeros sin nombre, amigos que os quedáis /  las verdades sociales valientes propagad, / es esta la venganza que queremos que hagáis. 
 
Y a ti que nos destierras con una vil mentira, / república burguesa, te pesará algún día; / ahora te acusamos de cara al porvenir.
 
  Desterrados sin tregua, vamos de tierra en tierra / a predicar la paz y a promover la guerra, /  paz a los oprimidos, la guerra al opresor. 
 
Helvecia, tu gobierno como esclavo se vende, / de tu pueblo valiente la tradición ofende, / e insulta la leyenda de tu Guillermo Tell.
 
Adiós los camaradas, amigos luganeses, / adiós, blancas de nieve montañas ticinenses, / caballeros andantes al norte echados son.
 
 

miércoles, 5 de julio de 2023

Nueva batería de mensajería breve

El tour de Francia, igual que el giro de Italia, 'protege' la inmunidad de sus ciclistas obligando a quien entre en contacto con ellos a la mascareta de rigor.
 
 
 Y el Óscar de la academia por su magistral interpretación en la película bélica del teatro del mundo es para Volodimir Zelenski, el actor ucraniano tragicómico.
 
Encantado con el papel de protagonista estelar internacional que se le otorga, está dispuesto a desencadenar una guerra mundial antes que firmar el armisticio.
 
El títere del tío Sam que es el presidente de Ucrania propone el uso de cánnabis terapéutico para combatir los horrores de la guerra a la que arroja a su país.
 
Asimismo propone el uso de la lengua inglesa en la Ucrania atlántica, europea y anglófona que desea para el futuro, cuando estalle la bomba relojera de la paz.
 
El pasaporte acredita la identidad y nacionalidad de las personas y garantiza su movilidad en unas fronteras que, si no existiesen, no impedirían tal movilidad.
 
 
Los telediarios echan hoy como noticia el caso que puso en escena la película “Atenea” (2022) de Romain Gavras de la plataforma Netflix: la ficción se anticipó.
 
 
 Gnóthi seautón, dijo el oráculo de Delfos, lo que en román paladino es “Conócete a ti mismo”. Voy a darte un consejo mejor: Olvídate a ti mismo, olvídate de ti.
 
El pez grande se come al chico, dice la gente, lo mismo que el Amor mayúsculo se come al minúsculo, que es, no hace falta decirlo, el buen amor, el de verdad.
 
El rey emérito se autoproclamó –y sus cortesanos lo corearon- “motor del cambio” para que el legado del decrépito dictador cambiara a fin de poder permanecer.
 
 

Los conservadores quieren que las cosas se mantengan, los progresistas, que cambien. Ni unos ni otros ven que las cosas necesitan cambiar a fin de conservarse.
 
Ya veremos, dijo el ciego, pero ya sabemos que el peor ciego es aquel que no quiere ver, y que para ver hay que perder la fe, porque la fe obnubila y enceguece.
 
 Lo que envejece no son las canas, ni las arrugas, ni los años ni los quilos de más que hemos echado a la personalidad, sino las ideas que tenemos y nos tienen.
 
Cuando uno está enamorado de alguien, ya no quiere a nadie, dijo Proust, ni siquiera, por muy paradójico que parezca, a la persona de la que está uno enamorado.
 

 
La pescadilla de enroscar, el pez que se muerde su propia cola: yo no puedo resolver mis problemas propios personales, porque yo soy mi único problema personal.
 
Para ver hay que olvidar el nombre de la cosa que se ve, dijo Valéry; para conocer a alguien hay que olvidarse de su nombre propio y de la idea que tenemos.
 
 Matadero y pudridero de almas muertas, el proceso educativo asesina al niño, que labra así su porvenir cavando la propia tumba donde yacerá muerto y enterrado.

martes, 4 de julio de 2023

¿Cómo hacerSE español si no SE es?

    Tengamos en cuenta, lo primero de todo, que nadie de los que tenemos la nacionalidad española hemos nacido españoles. Uno no nace español, sino que se hace. Otra cosa es que por derecho de nacimiento si se viene al mundo en estas tierras cuando al menos uno de los progenitores es español se obtenga automáticamente la nacionalidad española, que es el vínculo jurídico que une a la persona física con el Estado español en este caso. 
 


    Pero aunque se tenga la nacionalidad española, no se es español todavía, porque para serlo cabalmente uno  necesita haber adquirido la lengua española, cosa que sucede sin mucho problema en los primeros años de vida, o haberla aprendido si no es su lengua materna. Otra cosa es la escritura alfabética, es decir la adquisición de la letra, que según el célebre adagio pedagógico antiguo sólo con sangre entra, tanto su lectura como su escritura, lo que suele correr a cargo en nuestro país de la escuela primaria y secundaria obligatorias. 
 
    Pero si uno no ha nacido en España y quiere adquirir la nacionalidad española debe superar una prueba que no todos los españoles de hecho pasarían. El examen de Conocimientos Constitucionales y Socioculturales de España (CCSE) corre a cargo del Instituto Cervantes, que lleva el nombre de nuestra mayor gloria literaria. El logo de dicho instituto es la letra más genuinamente española de nuestro abecedario, que es la Ñ de España y también la de coño, nuestra interjección más frecuente. 
 
Sede del Instituto Cervantes de Tetuán.
 
     Si uno supera dicha prueba acredita poseer ciertos conocimientos sobre la Constitución Española y la realidad social y cultural de nuestro país, que es el requisito exigido por ley para todos aquellos que deseen solicitar la nacionalidad española. 
 
    No es un ejercicio extremadamente exigente: dura cuarenta y cinco minutos como máximo y se consigue el APTO respondiendo al menos a 15 de las 25 preguntas que se plantean. No se requiere, de hecho, saber leer ni escribir, porque si uno no está alfabetizado puede solicitar hacer la prueba oralmente, pero lo que sí es fundamental es el conocimiento de la lengua porque sin él malamente se podrían entender y responder las preguntas socioculturales que se formulan. 
 

     Si uno suspende, tiene otra oportunidad sin coste alguno añadido. La matrícula cuesta 85 eurazos. He aquí algunas de las 25 preguntas de uno de los exámenes realizados: 
 
-La guerra de la independencia en España transcurrió entre los años...
 a) 1936-1939 b) 1808-1814 c) 1701-1715 
 
 -La inspección y recaudación de los impuestos que gestiona el Estado corresponde a... 
a) El Tribunal de Cuentas b) el Consejo Económico y Social c) la Agencia Tributaria 
 
-El Principado de Asturias limita al norte con... 
a) el Océano Atlántico b) el mar Cantábrico c) el mar Mediterráneo. 
 
    No todos los españoles podrían acreditar de hecho estos conocimientos básicos  sobre la realidad sociocultural patria, y más de uno seguro que suspendía, conocimientos que, sin embargo, se imponen a todos los que quieran hacerse españoles. 

lunes, 3 de julio de 2023

La muerte de un adolescente

    La muerte del adolescente Nahel, de 17 años el martes 27 de junio por la mañana tras recibir un disparo a bocajarro en el interior de un vehículo en Nanterre, en las afueras de París, durante un control policial, no fue un accidente ni un disparo fortuito. La policía le había dado la orden de detenerse.  No se detuvo. Y una orden es una orden. No la cumplió. El policía apretó el gatillo: es la esencia misma del Estado.  
 
    En efecto, el Estado se encarga de la administración y suministro de muerte a todos y cada uno de sus súbditos, a los que tarde o temprano les llega la hora de la verdad, su hora, la hora de su muerte. En esta ocasión le tocó a un muchacho. Era solo un chaval, un menor de edad que conducía sin carnet y que se había saltado un control, lo que no le da derecho a la policía, dice la gente, a matar a una víctima inocente. 
"¡La policía mata!"
 
     Curiosa expresión esta de “víctima inocente” que sugiere que, por contraposición, puede haber víctimas culpables,  pero es mentira porque todas las víctimas son inocentes. Pero no volvamos la vista a otro lado: tú también, yo también, nosotros también, todos,  incluido el verdugo que apretó el gatillo, somos víctimas inocentes de este estado intolerable de cosas contra el que es preciso rebelarse aquí y ahora, sin ir más lejos, por ejemplo. Aquí también han asesinado a un adolescente, más aún, a un niño: esa es la auténtica tragedia: mírate al espejo, sí tú mismo: tú eres tu propia víctima inocente y tu propio verdugo. Aquí y ahora. 
 
    En Francia, nos cuentan los medios, se han extendido las protestas hasta el punto de que cunde el pánico, un miedo que es enseguida viralizado e instrumentalizado, por por el poder, que toma medidas excepcionales: Se comparten los vídeos, las imágenes y los titulares alarmistas. Los medios, incluidas las redes sociales en la denominación, retransmiten fotografías impactantes de fuego por doquier: arde un supermercado, coches, hay heridos, detenidos, saqueos de tiendas, titulares alarmistas y alarmantes. La gente comparte las imágenes y los vídeos que reciben y se convencen de ello: esto es la realidad, toda la realidad y nada más que la realidad. ¡Arde París! ¡Francia entera está en llamas! ¡Es la Guerra Civil! 
 
 

    Vehículos blindados patrullan por las calles, se despliegan cuarenta mil agentes, se decreta el estado de emergencia, suspensión del transporte público a partir de las 21.00 horas, cancelación de todos los actos programados, toque de queda, cientos de detenciones e incluso se baraja la posibilidad de un bloqueo de las redes sociales. 
 
    Muchos sospechan que los disturbios están incitados precisamente por quienes quieren imponer el estado de emergencia. Todo tiene el aspecto de un golpe de Estado, como cuando el presidente de la república pronunció aquel “Estamos en guerra” contra un virus que no era tan fiero como lo pintaban, pero que sirvió para lo que sirvió.
 
    La instrumentalización por parte del Gobierno del miedo al pánico, ya sea orquestado o no, funciona a las mil maravillas, tan bien que si el caos dura un poco más, podían decretar un Super Estado de Emergencia con el apoyo de casi todas las fuerzas políticas parlamentarias. 
    
 
    Ya hay quienes han pedido mano dura, un régimen excepcional que amplía los poderes del Ministro del Interior, y del Presidente de la Macronía para asumir todos los poderes a fin de instalar en Francia una dictadura chinesca, con una población servil completamente controlada por las fuerzas del orden, al servicio de un puñado de tecnócratas apesebrados por el Foro Económico Mundial.
 
    Los enfrentamientos contra la policía son acciones equivocadas que lo único que logran es echar más leña al fuego. La protesta de la gente no debería centrarse en asaltar las comisarías, ni en lanzar cócteles incendiarios contra ellas ni de atacar a los esbirros de las fuerzas represivas del Estado, sino, sobre todo y única- y exclusivamente de matar al policía interiorizado que todos llevamos dentro. Ni más ni menos. Porque ese, el policía interior, no el gendarme que controla a los demás, sino el que nos controla a nosotros mismos y controla a los demás,  es el más peligroso de todos, el asesino que hay que asesinar para que no asesine al niño que llevamos dentro.

domingo, 2 de julio de 2023

¿Qué es una mentira?

    En la entrevista que sostuvo el otro día Pedro Sánchez con Pablo Motos en un programa televisivo de máxima audiencia, el presentador le acusó de mentir, y el presidente se defendió diciendo que él no mentía, sino que rectificaba. 
 
  El presidente, arremangado luciendo su pulsera arcoíris, eje de su campaña electoral.

    Transcribo sus palabras:  ¿Qué es una mentira? Mentir a mi juicio -y creo además que los espectadores pueden opinar más o menos lo mismo- mentir es decir algo que sabes que no es cierto con la intención de engañar. [...]¿Adolfo Suárez mintió cuando dijo que no iba a legalizar el Partido Comunista de España y luego lo legalizó? ¿Felipe González mintió cuando dijo que la OTAN, de entrada, no, y luego provocó un referéndum para entrar en la OTAN? Para mí, después de cinco años como presidente del gobierno, Pablo, lo que le puedo decir es que eso no es mentir, eso es rectificar. Y además rectificaron bien porque fue bueno para la democracia española legalizar al Partido Comunista al principio de nuestra democracia y fue bueno también para España ahora que estamos viendo la guerra de Putin en Ucrania el ingresar en la Alianza Atlántica. 
 
    Los dos ejemplos que pone de Adolfo Suárez y Felipe González, ambos ex-presidentes del gobierno, tienen algo en común. Dijeron que no iban a hacer una cosa y acabaron haciéndola. Al margen de que sea bueno o malo lo que acabaron haciendo, no cabe duda de que su rectificación, legalizar el Partido Comunista de España en el primer caso, y entrar en la OTAN, en el segundo, consistió en hacer lo contrario que habían proclamado.

   Adolfo Suárez fue nombrado presidente por el Rey en 1976 para realizar la denominada a bombo y platillo transición democrática y elegido al año siguiente en las urnas como representante de un engendro político denominado UCD (Unión de Centro Democrático), que no era de derechas ni de izquierdas, sino de centro. Si alguna vez pudo prometer y prometió, como le gustaba repetir, no legalizar el PCE, eso no formaba parte de su programa político electoral, pues la legalización fue antes de los comicios, sino de un cambio de opinión motivado por las circunstancias. 



   Pero en el caso de Felipe González, había prometido que si salía elegido no entraríamos en la Alianza Atlántica y desmantelaría las bases norteamericanas en nuestro país. El lema de su campaña fue "OTAN, de entrada no". Salió elegido y provocó un referéndum para meternos torticeramente de cabeza en la Alianza Atlántica, cediendo vergonzosamente a las exigencias de los gringos, como dábamos cuenta aquí mismo para los que carecen de la memoria histórica del caso. 
 
    Decía el doctor en economía Pedro Sánchez en la mentada entrevista que eso no era mentir, que era rectificar, lo que me recordó enseguida la canción “Cuervo ingenuo” que Javier Krahe le dedicó a cuenta de eso a Felipe González, y que empezaba diciendo: Tú decir que, si te votan, / tú sacarnos de la OTAN. / Tú convencer mucha gente, / tú ganar gran elección. / Ahora tú mandar nación, / ahora tú ser presidente. / Hoy decir que esa Alianza / ser de toda confianza, / incluso muy conveniente. / Lo que antes ser muy mal / permanecer todo igual, / hoy resultar excelente. / Hombre blanco hablar con lengua de serpiente. / Cuervo ingenuo no fumar / La pipa de la paz con tú / ¡Por Manitú! 
 
 Pablo Iglesias y Javier Krahe cantan al alimón "Cuervo Ingenuo"
 
     El doctor Sánchez en la mentada entrevista le dice al entrevistador que "después de cinco años de gobierno" como lleva él, lo que todo el mundo entiende que es mentir no es mentir, es rectificar. Podía haberlo dicho más claramente de otra forma:  gobernar, como ha hecho él durante cinco años consecutivos, es rectificar: rectum facere, hacer lo que está mandado y se considera políticamente correcto porque los que mandan son los que más obedecen, para lo que modifican todas las veces que haga falta su opinión, a riesgo de hacer lo contrario que habían prometido. Gobernar es mentir, es decir, engañar a la gente. Y eso todos los presidentes de este país y de todos los del mundo lo hacen muy bien: es su tarea de gobierno.
 
    Decir, además, que la rectificación de Felipe González fue buena para España "ahora que estamos viendo la guerra de Putin en Ucrania" es una mentira como una catedral. No se nos ha perdido nada en esa guerra que tantos sacrificios económicos nos cuesta ni en la Alianza Atlántica de Dios.
    

    Hombre blanco, desde luego, seguir hablando con lengua bífida cual espada de doble filo, lengua de serpiente viperina capaz de decir una cosa y hacer luego la contraria. Hombre blanco ser pro OTAN, pro UE, pro EURO, pro Zelenski. Hombre blanco prometer 55 millones y cuatro Leopard a la guerra de Ucrania contra Putin, y Zelenski pedir a hombre blanco entrar en la UE y la OTAN. Hombre blanco creer ser el más progresista de la historia universal. 

sábado, 1 de julio de 2023

Hostis est intus (El enemigo está dentro)

    Desde el 22 de febrero del presente año, casi sin darnos cuenta, está operativa en toda la curtida piel de toro de las Españas de Dios y presente en nuestros teléfonos móviles la aplicación tecnológica ES-Alert, después de haber sido probada escalonadamente en determinadas zonas de todas las españitas o reinos de taifas durante los meses de octubre y noviembre, como dábamos cuenta de ello aquí.

    ES-Alert es un engendro integrado en la Red de Alerta Nacional, gestionado por el Ministerio del Interior a través del Centro Nacional de Seguimiento y Coordinación de Emergencias (CENEM) de la Dirección General de Protección Civil y Emergencias. 

"No te asustes si el móvil empieza a pitar y a vibrar."

     Esta tecnología, que nos ha venido impuesta por la Unión Europea, le permite al Gobierno enviar mensajes de alerta generalizados a la población en situaciones de catástrofe, a través de una aplicación que está insertada en los teléfonos móviles. El mensaje será bilingüe, en español y, como no podía ser menos, en la lengua del Imperio, que es la de la Unión Europea, que nos quiere a todos angloparlantes.

    Es un sistema que se conoce también con el nombre de 112 inverso, porque en lugar de ser los ciudadanos los que llamando a ese número advierten de una emergencia a las autoridades, son ahora estas las que alertan a la ciudadanía.

El nuevo sistema para encerrarte en casa con un simple SMS (en Italia, IT-Alert)
 

    En primer lugar parece algo positivo y útil en casos de emergencia real, pero tengamos en cuenta que puede haber falsas emergencias. Además, siempre ha habido catástrofes y nunca hasta ahora una invasión de nuestra privacidad, en lo más íntimo que es nuestro teléfono supuestamente inteligente.

    Como señala el filósofo italiano Diego Fusaro, el hecho provoca algunas perplejidades, como, por ejemplo, que el gobierno pueda como el Gran Hermano declarar una emergencia irreal ante un enemigo invisible dándonos órdenes orgüelianas como las que ya hemos padecido: no salgas de casa, mantén la distancia social, ponte la mascarilla, vacúnate...

 

    La segunda perplejidad es que la citada aplicación se puede desactivar -yo mismo la he desactivado en mi dispositivo-, pero no desinstalarse, porque viene de fábrica. En el caso de un móvil como el mío con el sistema Androide, se va al menú de “Ajustes”, de ahí a “Seguridad y emergencias”, después a “Alertas de emergencias inalámbricas”, y ahí se puede desactivar la opción, que viene ya activada de “Permitir alertas”, y quitarle la vibración y el pitido al móvil.  Allí se encuentra instalada y activada por defecto la opción que nos ocupa de “Pre-Alerta de Protección Civil”.

    El Gobierno, en efecto, a partir de ahora puede declarar las emergencias reales o irreales que desee: fenómenos meteorológicos adversos, erupción de volcanes, terremotos, epidemias o accidentes químicos, entre otras catástrofes, porque de lo que se trata es de convertir la excepción en regla, y en términos de Giorgio Agamben, imponer el Estado de Excepción, es decir, la suspensión provisional y extraordinaria del orden jurídico, como paradigma normal de gobierno.