martes, 2 de abril de 2024
Por la desconexión total
lunes, 1 de abril de 2024
Mahón, o no hay dos sin tres
domingo, 31 de marzo de 2024
¿Resurrección? No, gracias.
El peregrino casualmente se llama Χρήστος (Chrístos). Su nombre propio suena igual, aunque se escriba distinto, que Χρίστος, el nombre del Ungido o Elegido, por lo que para evitar confusiones que incurran en la blasfemia religiosa, el nombre del Mesías se acentúa en la última sílaba Χριστός (Christós), mientras que el de nuestro peregrino descreído, que es un nombre de varón muy común en Grecia, se acentúa en la primera .
sábado, 30 de marzo de 2024
EXTRA ECCLESIAM NVLLA SALVS
Fuera
de
la Iglesia (se sobreentiende que de la católica, apostólica y romana,
por supuesto, que es la verdadera, aunque no creamos mucho en ella, que
es la que se apropió de la palabra griega "iglesia", que quería decir
"asamblea") no hay ninguna salvación. Lo dejó dicho
en latín Cipriano de Cartago, san Cipriano, en el siglo III de nuestra
era: EXTRA ECCLESIAM NVLLA SALVS. Esta
afirmación no se refería en principio a los que no habían recibido la fe de Cristo con las aguas del
bautismo, sino a los herejes, cismáticos y apóstatas que decidieron abandonarla
y que según se afirmó en el concilio de Letrán se condenarían
yendo “al fuego eterno”.
Al parecer fue san Pablo el primero que utilizó este vocablo tomado del ámbito de la política para referirse a la congregación de los fieles cristianos que se reunían no ya para discutir y deliberar y, llegado el caso, tomar alguna decisión democráticamente, sino para rezar y celebrar periódicamente el sacramento de la eucaristía, formando una comunidad reglamentada bajo una férrea jerarquía (masculina, por supuesto).
Esta misma raíz *sol, en grado cero y con el sufijo –wo, origina el adjetivo saluos, -a –um, con el significado de entero, sano y salvo. También el verbo salueo que en principio significaba tener salud, estar sano, y que por eso se utilizaba en formas de saludo en imperativo salue/saluete, y en latín cristiano el verbo saluo, con el significado de salvar y curar, que es el origen de nuestro salvar, salvación y salvador, nunca utilizado por los clásicos con ese sentido. De hecho la palabra saluatio sólo aparece en la Vulgata, que es la traducción al latín de la Biblia, y en autores cristianos como redención para la vida eterna operada por Cristo.
viernes, 29 de marzo de 2024
¡Esto es la guerra!
El gobierno galo saca el ejército a la calle para que la población se vaya habituando a la presencia de las tropas como algo esencial de su paisaje cotidiano.

jueves, 28 de marzo de 2024
Culto al cuerpo (body building)
miércoles, 27 de marzo de 2024
Del derecho a la educación universal y el fracaso escolar
Fracaso escolar: ¿Fracasa el niño que va a la escuela o fracasa la escuela a la que va a la fuerza por obligación y muchas veces con lágrimas en los ojos y no por devoción, no se olvide nunca esto, el niño? El fracaso escolar no es el fracaso de los niños, sino de la institución, que les priva de libertad en una etapa fundamental de su vida so pretexto de educarlos y de formarlos "integralmente". Resulta sarcástico que a esto lo llamen algunos pedagogos "éxito educativo".
Los apologetas del invento no ven más que virtudes en él que yo no acierto a ver por más que lo intento: creen que será positivo para la conciliación familiar, la igualdad y la corresponsabilidad de varones y mujeres en el hogar. Aseguran que terminará con la precariedad laboral femenina y mejorará hasta eso que les preocupa tanto de las pensiones... La justificación pedagógica no reconoce que se van a crear abiertamente guarderías con dinero público para cambiar a los niños los pañales y adoctrinarlos desde bien pequeñitos, sino para “construir en estas edades tan tempranas un armazón muy potente (sic, por la terminología pedodemagógica) para la elaboración del lenguaje a través del aprendizaje lector, escritor o de conceptos sencillos construidos a partir de la manipulación, experimentación u observación”. ¡Como si hiciera falta que nos enseñaran a hablar para que sepamos decir que no, que es lo primero que decimos sin que ningún experto en educación infantil nos lo enseñe!
martes, 26 de marzo de 2024
Mucha locura
lunes, 25 de marzo de 2024
Vientos de guerra (Diego Fusaro)
Diego Fusaro (1983-...) es un filósofo italiano que se considera alumno independiente de Hegel y Marx y que políticamente se sitúa más allá de las categorías tradicionales de 'izquierda' y 'derecha', por lo que ha sido tildado despectivamente de 'rojipardo'. Al margen de la etiqueta con la que queramos definir al autor, el análisis que hace sobre la situación política europea 'Europa, prepárese para la guerra', publicado en Il giornale d'Italia el 22 de marzo pasado, que se ofrece aquí traducido, es incontrovertible.
Vientos de guerra comienzan a soplar también en nuestra Europa. Y ahora la Unión Europea apoya la necesidad de preparar a los civiles para la eventualidad de una guerra. Nos habían garantizado que la Unión Europea nos protegería de las guerras: era uno de los mantras favoritos de los euroinómanos de las brumas de Bruselas. Se trataba de una fake news entre las muchas en las que se basó el discurso de celebración de la Unión Europea: una fake news como aquella según la cual -Prodi dixit- gracias al euro trabajaríamos un día menos, ganando como si trabajásemos un día más.
¿Por qué debería Europa prepararse para la guerra? Y luego, ¿para qué guerra? ¿Quizá la OTAN se esté preparando para atacar a Rusia con una guerra preventiva pretendiendo que la propia Rusia quiere atacar a la OTAN? La verdad es que Europa debería haber asumido inmediatamente una postura de neutralidad, es decir, desde que comenzó la horrenda guerra en Ucrania, fomentando las negociaciones y la diplomacia, los pactos y el diálogo. Y, en cambio, lamentablemente eligió el camino de enviar armas a Kiev: como incluso un niño podría comprender fácilmente, enviar armas a una de las dos partes involucradas en el conflicto equivale a participar en el conflicto. Nos dijeron con insistencia que enviar armas a Kiev significaba promover la paz: una mentira igual a la del médico que dijese que quería combatir la diabetes suministrándoles azúcar.
Desgraciadamente, Europa ha elegido el camino de la guerra, obedeciendo a los imperativos del gran jefe de las barras y las estrellas: ese gran jefe que ha ocupado impunemente Europa desde 1945 con bases militares que a priori niegan cualquier independencia de la propia Europa, convirtiéndola de facto en una colonia de Guásinton. Y ahora sabemos que Guásinton necesariamente quiere la guerra con la Rusia de Putin, culpable de no arrodillarse ante su dominación imperialista que aspira a someter al mundo entero al consenso de Guásinton.
En este conflicto entre potencias mundiales, Europa desempeña el papel del jarrón de terracota de Manzoni entre jarrones de hierro. No hay duda: Europa está actualmente administrada por locos sin escrúpulos, dispuestos a sacrificar a los pueblos europeos en aras del imperialismo de Guásinton y de sus continuas atrocidades perpetradas en nombre de la libido dominandi. Evidentemente los locos que quieren la guerra son los que no irán al frente de combate y los que enviarán al frente a los que en su mayor parte no quieren la guerra.
oOo
domingo, 24 de marzo de 2024
Covid(iocia) persistente
Hace cuatro años, que por marzo era por marzo, en un año también bisiesto como este, en 2020, el planeta fue invadido por un bicho que soltaron los medios masivos de (in)formación y nos lo metieron en todos y cada uno de los hogares, obligándonos, gracias a la mala gestión gubernamental, a permanecer confinados, decían finamente, para no decir encerrados bajo arresto domiciliario tragando informaciones del virus por un tubo día y noche y cumpliendo ridículos protocolos y ordenanzas.
¿Eran necesarias tantas medidas y tantas restricciones como nos obligaron a tomar? Para nosotros desde luego que no. Sí para los que organizaron la pantomima enmascarada. Fueron unos días de terror distópico y de calma espeluznante y preciosa que vivimos acojonados. ¿Y qué nos queda de todo esto? ¿De verdad hemos salido mejores como cacareban algunos que íbamos a salir y que todo iba a ir bien? ¿Cambió todo o nada en absoluto? ¿No hemos participado sin querer en un proceso de hipnosis colectiva que nadie ahora quiere recordar?
Cuatro años después, esos días parecen lejanos y
débiles como una pesadilla medio olvidada y brumosa, y sólo unos pocos
los recordamos como lo que fueron: la aplicación de un programa de
encarcelamiento forzoso, de exclusión de los que no nos sometimos al
proceso de vacunación y de control social general. El gobierno de las Españas, por su parte, alardea de que el día que se decretó el Estado de Alarma fue el día "que aprendimos a vencer".
Aquí y allá se ve gente todavía paseando con mascarillas sanitarias pero su uso no se ha generalizado tanto como muchos vaticinaban. No era tan fiero el león como nos lo pintaban. Nunca, de hecho, el león es como nos lo pintan y como nos lo imaginamos en nuestro deseo o temor. Pero algo sí ha sucedido: La homogeneización es más intensa, las colas más largas, los establecimientos de comida y entretenimiento más llenos, los prejuicios, la paranoia y la incomprensión que ya entonces caracterizaban la comunicación de las personas en las redes sociales han aumentado considerablemente.
Las multitudes han vuelto pero, extrañamente, la multitud parece más minoritaria.Y también más ansiosa y más cansada, pero esto puede deberse en parte al efecto que ha tenido en millones de personas el llamado long convid o covid persistente o de larga duración que hace por ejemplo a una asturiana de cuarenta años, relativamente joven, que salía en la prensa decir que sufre persistentemente desde hace cuatro años esta extraña enfermedad: "El Covid cambió mi vida. A veces me quedo totalmente paralizada. No puedo ni hablar". No puede trabajar pero la Administración no reconoce su enfermedad, una enfermedad que a fecha de hoy nadie sabe muy bien exactamente en qué consiste, pero que ha dejado una huella indeleble a esta mujer a la que le ha destrozado (o “jodido” como dice ella misma) la vida, que afirma que no puede llevar una existencia normal ni siquiera para el día a día en casa.