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martes, 26 de marzo de 2024

Mucha locura

    Traigo aquí otro poema de la estadounidense Emily Dickinson (1830 – 1886) que trata de dar razón a la locura, contra lo que piensa la mayoría de la gente. En esto, como en todo, manda la mayoría, que es la ley de la democracia. Si uno asiente, es considerado cuerdo. Si disiente, es sin embargo un loco peligroso que acabará encerrado en un frenopático. Viene el poema a decirnos que muchas de las cosas que la gente considera normales son, de hecho, una locura total, y lo que la mayoría por el contrario considera una locura es en este mundo de locos hacer uso de razón. 
 
 
    Emily Dickinson lo dice en ocho versos (trímetros y tetrámetros yámbicos), con rima asonante o parcial entre el segundo y el cuarto, y consonante o total entre el sexto y el octavo. 
 
      El poema fue escrito en torno a 1862, pero publicado, como la mayoría de la obra de Dickinson, después de su muerte.
 
  Much Madness is divinest Sense 
 to a discerning Eye.
 Much Sense, the starkest Madness.
’Tis the Majority 
in this, as all, prevail.
Assent - and you are sane;
Demur - you’re straightway dangerous 
 and handled with a Chain.
     En mi libérrima versión prolongo los versos en medio pie átono de una sílaba. 
 
Si bien se mira, el loco tiene
  razón, divina gracia,
 y chaladura el cuerdo. 
Aquí la democracia,
 igual que en todo, manda. 
Di sí, y serás sensato;
oponte, y te atan, peligroso,
por loco y desacato.