miércoles, 15 de diciembre de 2021

Un poco de política

EL ciudadano, ese Don Nadie que somos todos y cada uno de nosotros, escucha a esos que dicen que hablan en su nombre y no reconoce ninguna de sus palabras como propias. ¿Cómo pueden ellos representar mis angustias, mis deseos, mi miedo, mis esperanzas y mi desesperación? ¿Qué poder divino se han arrogado para pretender tal cosa? Los que mandan son también unos mandados. ¿O no lo sabían? Sí, sí lo sabían, lo que no saben es cuál es el verdadero rostro del amo al que están sirviendo. 

oOo

Donde hay patrón no manda marinero; para eso los marineritos eligen democráticamente a bordo al capitán o patrón del barco que se arroga así su representación convirtiéndose en el legítimo delegado de la voluntad popular, para poder ejercer su poder sobre la marinería dictatorialmente con el total consentimiento de aquella, que ya no considera que el poder del que está revestido el patrón sea despótico, sino democrático, siendo así la democracia actual la peor de todas las dictaduras habidas y por haber.

oOo
Viñeta de Ramón, Hermano Lobo (1975) 

El caos y la anarquía. -Un dirigente político habla a las masas desde un estrado y les pregunta: "¿Qué preferís? ¿El caos y la anarquía o yo?". Las masas responden al unísono: "¡El caos y la anarquía!". El dirigente les replica visiblemente irritado: "Pues os jodéis, porque el caos y la anarquía… soy yo". Y tiene razón porque el caos y la anarquía son las notas definitorias del sistema u orden (más bien des-orden) establecido.

oOo

Medios de (in)comunicación (glosa a Chesterton): Aparte de servir para incomunicarnos, lo contrario de lo que sugiere su nombre, los medios de comunicación sirven también para ocultarnos la realidad al informarnos de ella, porque cuando nos informan nos conforman, nos deforman, nos meten en la horma de su zapato: dan forma a lo informe, es decir, a la realidad, falsa como es por definición y real, sin embargo, como ella sola: los medios masificadores crean la realidad ocultándonos la verdad, porque la realidad que crean es esencialmente falsa y mentirosa.  Una persona muy informada es, pues, por definición, una persona muy deformada por los medios. ¿Sucede lo que nos cuentan o lo único que sucede es  que nos cuentan lo que nos cuentan? Desengañémonos, no existen los hechos, sólo las interpretaciones.

oOo

Terrorismo de Estado.-  Decir que el Estado de Israel es un estado terrorista es un pleonasmo, es decir, algo que podría resultar redundante, si no fuera porque da vigor a la expresión, como cuando decimos que hemos visto algo con nuestros propios ojos. Sin riesgo de hipérbole, puede generalizarse que todos los estados son terroristas, porque todos son administradores de muerte, todos cuentan a sus súbditos y los condenan a la pena de una muerte siempre futura pero real. El Estado en general y el de Israel o el de España en particular basan su existencia en el miedo de la gente, que fomentan, y en el caso extremo en el terror: todos y cada uno de los Estados que en el mundo hay son terroristas sin ninguna excepción de esta regla general., encarnaciones abstractas que son de la misma realidad, el viejo dios monoteísta.  El boicot, por lo tanto, que proponen algunas almas caritativas y bondadosas a los productos israelíes en el mercado no debería distraernos mucho. Todos los Estados son totalitarios, incluso los democráticos que pretenden no serlo. Quizá estos últimos sean los más totalitarios de todos, porque son los que más camuflan su afán de totalidad global,  imponiendo al conjunto de la población la voluntad de una mayoría conformista previamente adocenada y conformada por el adoctrinamiento político y audiovisual.

No hay comentarios:

Publicar un comentario