domingo, 19 de mayo de 2024

L' ammalato magginario, de Belli

    Se hace eco aquí Giuseppe-Gioachino Belli de la burla popular que recae sobre el enfermo imaginario, haciendo un guiño a Molière. El poeta da consejos a un amigo hipocondriaco basados en el sentido común: que coma, que beba, que salga a tomar el aire y a pasear, y el consejo explícito y cómico de que se saque el enema, lavativa o clisma que se ha introducido en el recto y el colon a través del ano "para curarse". En los tercetos finales del soneto le anima a que deje de tener miedo a la enfermedad (y a la amenaza de muerte que conlleva), y de que viva con alegría, no apesadumbrado, para lo que debe tirar al río y deshacerse de todas las medicinas que toma, porque el tratamiento, o el remedio, como decimos nosotros,  es peor que la enfermedad. 


L' AMMALATO MAGGINARIO

 
Lo crederò pperché mme lo ggiurate
c'un antro po' nnun ve trovavo vivo.
L'aspettito però mmica è ccattivo:
io ve vedo com'erivo st'istate.

Volete guarì ssubbito? Maggnate,
bbevete quarche bbon ristorativo,
levateve dar culo er lavativo,
e usscite in ste bbellissime ggiornate.

Fora, fora: un po' d'aria de campaggna:
quello sce vò ppe vvoi: moto, alegria,
e ppoi ggnente pavura de magaggna.

Sù, a ffiumaccio spezziale e spezziaria.
L'omo campa cquaggiù dde quer che mmaggna;
e 'r curasse è la peggio ammalatia.

5 settembre 1835

 


 El ENFERMO IMAGINARIO

Le creeré porque jura y perjura

que a poco más y no lo encuentro vivo.

Pero no tiene aspecto llamativo:

viendo yo su veraniega figura.

Coma bien si quiere rápida cura,

bébase un buen tónico digestivo,

sáquese del ojete el lavativo

y salga a disfrutar de la natura.

Fuera, y tome el aire de la campaña;

lo que necesita: alegría, andar

y no le tenga miedo a la guadaña.

¡Botica y boticario al río al par!

El hombre vive de lo que rebaña,

y el curarse es peor que el enfermar.

 

sábado, 18 de mayo de 2024

Pareceres XLVIII

236.-Parresía: unos octosílabos de Ésquilo, al que restituimos la acentuación esdrújula que corresponde a su nombre, tomados de su tragedia de tema histórico Los Persas (versos 591-594), que decían así en versión original celebrando la parresía de la gente corriente o capacidad de poder decirlo todo con libertad de expresión: οὐδ᾽ ἔτι γλῶσσα βροτοῖσιν / ἐν φυλακαῖς· λέλυται γὰρ / λαὸς ἐλεύθερα βάζειν, / ὡς ἐλύθη ζυγὸν ἀλκᾶς. Podemos traducirlos en prosa y pueden decir algo así como: Los hombres -los mortales, dice él- ya no pondrán freno a sus lenguas porque el pueblo es libre de expresar sus pensamientos a voluntad, ahora que el yugo del poder ha sido quebrantado. Pero quizá convendría traducirlos en verso, tal como fueron escritos, con el mismo ritmo dactílico y con el eco de una rima asonante: Ya no se muerde la lengua / nadie, la gente se suelta / libre a decir lo que piensa, / rota del yugo la fuerza
 
 
237.- Elixir de amor. ¿Qué es el amor? Un niño caprichoso llamado Eros o Cupido, tanto monta, hijo de Afrodita o, si se quiere, porque es la misma, Venus: un mozalbete travieso, venéreo, loco de atar, hideputa y cegato. Ciego, sí, es el amor verdadero y eterno, que dura un par de años y que nos hiere con sus flechas del amor mucho más que Apolo el que hiere de lejos con sus punzantes dardos. ¡Dios nos libre del amor y no sólo del amor de Dios! Y es que no hay peor herida que la del amor, porque es la única que no tiene ni cura ni mucho remedio, como bien sienten y padecen en sus propias carnes todos los enamorados que en el mundo han sido. Bien fuerte era Sansón, y lo venció el amor -pues más tira coño que soga. Y el amor es siempre loco: yo estoy por vos y vos, como reza el refrán, siempre por otro. 
 

 238.- Cierre de burdeles, putas callejeras. Felipe IV decretó en su día el cierre de todos los burdeles del reino de las Españas. Al prohibirse los prostíbulos públicos, surgieron las casas de putas clandestinas, pero el puterío lejos de atajarse con esa medida siguió en creciente aumento. Las prostitutas preferían trabajar en prostíbulos en lugar de hacerlo en donde cuadrara, puesto que en los locales de alterne contaban con protección y fuera de allí estaban a menudo desprotegidas a merced de su clientela. Pero ¿no es un trabajo u oficio -el más viejo del mundo- la prostitución? Los que quieren abolirlo creen que no lo es, y que ninguna mujer se dedicaría voluntariamente a ello si pudiera ganar dinero haciendo otras cosas más dignas. Pero no entremos en cuestiones morales de dignidad e indignidad. Los trabajos, incluida la prostitución, son actividades que no se realizan gratis et amore por la gracia de hacerlas, sino por dinero. Ya que el trabajo es una forma de servidumbre -¿voluntaria?- remunerada que está legalizada -y hay incluso un Ministerio de Trabajo y Economía Social- legalizar también las mancebías en vez de tratar de abolirlasy condenar a las prostitutas a hacer la calle, sería más coherente con la política y economía social de dicho ministerio, con la higiene, la seguridad, la salud pública y el bienestar de los súbditos del reino.
 
 
239.- Eutanasia: Supongamos que le reclamamos al Estado el Derecho a Morir, el derecho a una Muerte Digna o Buena Muerte. ¿Qué más quiere él, que se dedica de ordinario a administrar la muerte, que es la vida cotidiana, de todos sus súbditos y a matarnos lentamente que no le reclaman así una Vida Digna o Buena Vida? No hay que reivindicar leyes, sino, en todo caso, despenalizar las existentes. El Estado a veces confunde derechos y deberes, e incluso define algunas cosas simultáneamente como un derecho y un deber. Eso podría pasar con la eutanasia, que el “derecho a morir” que reclaman algunos deje de ser un “derecho” y se convierta en un “deber” cuando se obligue a quienes no quieran hacer uso de ese derecho porque, si no lo hacen, ponen en peligro la existencia de la Seguridad Social y la caja de las pensiones se arruina? El problema puede surgir cuando uno se niegue a tomar la decisión correcta y solidaria. El Estado ya tiene demasiado poder y no tiene ningún empacho en abusar de él en cualquier momento, por lo que concederle más poderes sería, literalmente, como hacerse el haraquiri, el suicidio ritual japonés consistente en abrirse las entrañas del vientre. 
 
 
240.- Guerra y no conflicto. No deja de asombrarnos cómo en esta ocasión los mandarines del mundo y sus medios de formación de la opinión pública, llamando a las cosas por su nombre, han denominado “guerra” a la guerra, y no, como otras veces, “conflicto”, “intervención armada”, “misión humanitaria”, “operación especial” o cualquier otra zarandaja que sirva para ocultarnos la verdad. Sin duda se les ha escapado la palabra a los medios de conformación de la opinión pública. Pero la palabra, libre, se volvió como un bumerán contra los que la habían lanzado. Y hace unos años surgió el clamor popular contra la cruda realidad que designaba. Hasta la máxima jerarquía de la iglesia católica, apostólica y romana, se vio en la obligación de condenarla, no pudiendo bendecir la Santa Sede la guerra como cruzada como hiciera en otras ocasiones. Lo mismo sucede con la paz: no quieren la paz, sino la victoria porque lo que quieren es la guerra, ganar la guerra. No nos engañemos.
 
 

viernes, 17 de mayo de 2024

Armados hasta los dientes (y II)

    Los halcones de la guerra ya han desenterrado el hacha como hacían los indios norteamericanos ahora extinguidos, y está claro que no van a fumar la pipa de la paz. 
 
    Han adoptado una actitud beligerante y exigen una acción de fuerza inmediata, no dudando en impulsar la política guerrera y el gasto en armamento para estar preparados para la eventualidad de una guerra que no quiere nadie y que no cesan de prevenir, es decir, de hacer que venga antes de tiempo. 
 

     La unión Europea, por su parte, ultima un nuevo Plan de Defensa para afrontar los “múltiples riesgos geoestratégicos”. Les gusta utilizar palabros cultos como este de “geoestratégico”, que la gente corriente y moliente no sabe muy bien qué quiere decir, pero que suena a geo- tierra y a estrategia "arte -pero no una de las bellas, sino de las más feas- de dirigir las operaciones militares" que practicaban en la antigua Grecia los strategoí o generales, que a su vez eran los que dirigían a un stratós o ejército hacia la muerte ajena (del enemigo) y propia si hacía falta. 
 
    En este contexto beligerante, preocupa un poco la declaración del ministro de Sanidad alemán, de cuyo nombre propio no merece la pena acordarse, de que el sistema sanitario teutón debe estar preparado para la posibilidad de una guerra. Afirmó literalmente uniendo la pandemia con la guerra: "Alemania no sólo debe prepararse para futuras pandemias, sino también para grandes desastres y posibles conflictos militares". Expresaba así sus temores de una posible extensión de la guerra en Ucrania. “En caso de crisis, cada médico, cada hospital, cada autoridad sanitaria debe saber qué hacer". Se refería por ejemplo a la posibilidad de distribuir a un gran número de heridos europeos en general, incluidos los nacionales, en los hospitales alemanes. 
 
 
    Reconocía que algo había que hacer. “Hacer nada no es una opción”. Sentenciaba. Su discurso giraba ante el tópico de que hay que estar preparados y prevenidos, porque si renunciamos a la prevención “ni siquiera necesitaríamos un ejército”. Y ahí es donde dio en el clavo probablemente sin querer. Agitar el fantasma de la guerra, como hacen ahora los políticos europeos y la prensa oficial del régimen a su servicio, sirve para justificar la existencia de los ejércitos y de los gastos militares, y en último extremo de las guerras que quieren conjurar.

jueves, 16 de mayo de 2024

El rey está desnudo

    Poco más de un año después de la coronación real, el Palacio de Buckingham ha hecho público el primer retrato oficial del monarca británico. Firmado por el artista Jonathan Yeo, el cuadro, de dos metros de altura, muestra a su majestad vestido con el uniforme de gala de los guardias galeses, con el grado militar de coronel.
 
    El color rojo, como puede comprobarse, predomina en todo el lienzo, fundiéndose el del uniforme que viste el monarca, en el centro de la pintura, con un fondo igualmente bermejo que no se distingue. 
 
Retrato del Rey Charles III, Jonathan Jeo (2024)
 
     Destacan dos elementos, el rostro del rey con sus rasgos bien marcados, espada entre las manos y un pequeño y simbólico detalle: una mariposa que parece querer posarse sobre su hombro derecho que, al parecer, simboliza la transformación personal del rey comprometido con las causas medioambientales de defensa de la naturaleza.
 
    Al parecer se trata de una mariposa "monarca", nombre que le dio un entomólogo estadounidense porque es "una de las más grandes de nuestras mariposas, y cubre un vasto dominio".
 
Coronación del Rey Carlos III, Bob Moran (2023)
      
    Se ha hecho viral la comparación con la parodia de la coronación del monarca, con el virus coronado en la cabeza, que hizo el dibujante Bob Moran, que presenta al rey, como en el cuento de Andersen, desnudo, con el detalle significativo de su entrepierna, la reina fumándose un puro, y la inscripción latina que se repite en el marco del cuadro: REX ARDEAT IN AETERVM: que arda el rey eternamente, que sustituye al tradicional VIVAT REX IN AETERNVM. 
 
    Este es el vídeo en el que se superpone el dibujo de Moran al retrato oficial en la presentación del cuadro a los medios.
 
 

miércoles, 15 de mayo de 2024

Armados hasta los dientes (I)

    "El riesgo de guerra no es inminente, pero no es imposible", alertaba en febrero la regenta de la Comisión Europea, cuyo nombre propio no vamos a mencionar aquí. Y, siguiendo su estela, la ministra de la Guerra española, cuyo nombre tampoco mencionaremos, todos los nombres propios son intercambiables, cacareaba en marzo que la amenaza de guerra era “total y absoluta”. 
 
    Dos años después de la guerra en Ucrania y con Oriente Medio incendiado por la guerra de Israel en Gaza y la amenaza de un estallido de onda más amplia, los mandamases europeos han desenterrado el hacha de la guerra. No solo hablan a las claras y sin tapujos de “guerra”, sino que han aumentado el gasto militar a unos niveles “sin precedentes”, según el informe que publica anualmente el Instituto Internacional de Investigación sobre la Paz de Estocolmo (Sipri), según informaba The Guardian.
 
     Por primera vez, el gasto militar del gobierno ha aumentado considerablemente en los cinco continentes del globo terráqueo según el grupo de expertos Sipri, alcanzado un nivel récord de 2.440.000 millones de dólares, lo que supone el mayor aumento anual del gasto gubernamental en armas en más de una década. 
 
    A nadie se le escapa que hay un riesgo de conflagración porque las armas llevan escritos en ellas sus fines, y su fin es la guerra, y el fin de la guerra no es la paz, sino la victoria. 
 
    En contra de que se pueda hacer un buen uso de las armas, sacaba Rafael Sánchez Ferlosio en su Campo de retamas el refrán "puestos a reñir, el cuchillo es el que manda" y añadía sutilmente: "pero lo que vengo yo preguntándome hace tiempo es si no podría ser, en cambio, que fuese el cuchillo el que mandase ponerse a reñir". Y aducía en su apoyo el verso de Homero: El hierro por sí solo atrae al hombre, donde 'hierro' es metonimia de armamento en general, como en el dicho "el que a hierro mata, a hierro muere".
 
 
    No cabe duda de que las armas ejercen una fascinación en los seres humanos que es el aliciente que los empuja a manejarlas: el hierro de por sí arrastra al hombre a la guerra, independientemente del empleo bueno o perverso que quiera hacerse de él. No es el hombre el que tira del hierro, sino al revés: Es el hierro quien tira del hombre, como tradujo acertadamente don José Manuel Pabón al castellano el refrán homérico, lo que contradice el único argumento de los defensores del uso de las armas: no las usamos los hombres, sino que nos usan ellas a nosotros.  
 
    No somos, pues, los hombres los que hacemos un uso bueno o malo de las armas; el único uso bueno que cabe hacer de ellas es no usarlas; son las armas las que nos usan a nosotros y nos  convierten en carne de cañón, y ya se sabe para qué sirven, para nada bueno. Una pistola lleva escrito en sí misma el fin para el que ha sido fabricada. El gatillo llama al dedo urgentemente para que lo apriete. 
 
 
   El aumento sin precedentes del gasto militar es una respuesta directa al deterioro global evidente de la paz y la seguridad. Los dos Estados que más gastan (o mejor dicho invierten) en armamento son los Estados Unidos y la China, que vienen a sumar la mitad del gasto militar mundial según la citada fuente de información. 
 
    Lógicamente este dinero público es una inversión que general capital. La esencia del Estado es la guerra, como se ve a las claras, pero es también la esencia del Capital, que encuentra en ella actualmente su mejor inversión, con obsolescencia programada incluida. No se busca la paz, sino la victoria. Hemos pasado del capitalismo vírico al bélico en la búsqueda constante de nuevos mercados e inversiones.

martes, 14 de mayo de 2024

Economía caritativa, economía de Dios

    Investigando el origen de la frase «El rico es un ladrón o hijo de un ladrón» atribuida a San Juan Crisóstomo -nombre parlante que significa Boca o Pico de Oro-, también conocido como Juan de Antioquía (347-497),  no he encontrado esa formulación literal en lo poco que he leído de su obra, pero sí veo que puede resumir bastante bien, a modo de glosa, su doctrina sobre la riqueza y la pobreza. 
 
    Juan Crisóstomo reconoce, como buen cristiano que es, la legitimidad de la riqueza y, por lo tanto, de la privada propiedad. La riqueza y el dinero en general, viene a decir en sus homilías, no son algo malo en sí, depende del uso que hagan los poseedores. Pero él no pone en cuestión su existencia. No hay que maldecir del dinero, sino de su mala utilización. 
 
 
    El orador antioqueno no predica por lo tanto un comunismo económico, sino lo que podríamos llamar un comunismo caritativo; en eso consiste la economía divina o economía de Dios, que aconseja a los propietarios que compartan sus posesiones con los indigentes. 
 
    Con respecto a otros padres de la iglesia, desarrolla una tesis personal sobre la propiedad colectiva, en lo que podría acercarse a proclamaciones como la del anarquista Proudhon de que la propiedad, toda propiedad, es un robo en cuanto expropiación de lo común: no hay discusión, dice, sobre el uso de los baños, plazas, paseos y otros lugares públicos, sino por las viviendas particulares y el dinero "...lo tuyo y lo mío, esas glaciales palabras; pues de ahí la disputa, de ahí el odio. Pero si no hay esas palabras, entonces no se engendran ni la disputa ni la codicia" (...τὸ σὸν, καὶ τὸ ἐμὸν, τὸ ψυχρὸν τοῦτο ῥῆμα· τότε γὰρ μάχη, τότε ἀηδία. Ἔνθα δὲ τοῦτο οὐκ ἔστιν, οὐδὲ μάχη οὐδὲ φιλονεικία τίκτεται)·
 
 
    El orador declara su desconfianza, sin embargo, por las riquezas privadas de tierras, de mansiones y de capitales, porque son los bienes de los grandes especuladores del comercio de Antioquía, adquiridos deshonestamente más de una vez. A ellos viene a decirles que si no son unos ladrones por haber obtenido su fortuna ilícitamente apropiándose de lo común, poseen el resultado de un robo que han heredado.  Pero eso no le impide reconocer, como todos los demás padres de la iglesias, como se ha dicho, los derechos de la propiedad privada, de la que pueden hacer un buen uso compartiéndola. 
 
    Al final de la homilía XII a la Epístola a Timoteo de San Pablo, escribe Juan Crisóstomo formulaciones como las siguientes: 
     -Y tú, dime, ¿cómo es que eres rico? 
    -Heredé mis bienes.
     -¿Y de quién los has recibido? 
    -De mi abuelo.
     -¿Y de quién los recibió aquel? 
     -De su padre. 
    -¿Puedes retroceder varias generaciones y demostrarme que tu riqueza es legítima? No, no podrías; es forzoso que el origen y la raíz de aquella sean fruto de una injusticia. 
    -¿Cómo? 
    -Porque Dios en un principio no hizo a uno rico y a otro pobre, ni tampoco después tomó y mostró a uno muchos tesoros, y negó a otro el derecho de buscarlos: sino que dejó la tierra libre a todos por igual. ¿Cómo, pues, siendo común, tú tienes tantas y tantas fanegas, y el que es tu vecino no tiene ni un puñado de tierra? 
    -Mi padre -dice- me las transmitió. 
    -Pero ¿de quién las recibió él? 
    -De sus antepasados. 
    -Sí, pero es necesario encontrar el comienzo que es punto de partida. Jacob se hizo rico, pero porque recibió el salario de sus trabajos. Pero no quiero entrar en eso: sea legítima la riqueza y esté libre de toda rapiña; pues tú sin duda no eres responsable de lo que tu padre arrambló; pues posees el fruto del robo, pero tú no robaste (ἔχεις μὲν γὰρ τὰ ἐκ τῆς ἁρπαγῆς, ἀλλ' οὐχ ἥρπασας σύ). Pero te concederé que él tampoco robó, sino que posee el oro que brotó de algún modo del seno de la tierra. Pues bien, ¿es buena la riqueza por eso? De ninguna manera. Pero tampoco es mala, responde, si su poseedor no ha rapiñado; no es mala, si la ha compartido con los necesitados; pero si no la ha compartido, es mala y fraudulenta. 
 
     De ahí surge la frase atribuida a Juan Crisóstomo y que, al menos, resume perfectamente su pensamiento de que los ricos, si no son personalmente unos ladrones, son hijos o descendientes o herederos en general de ladrones, y son moralmente malvados si no comparten sus bienes con los necesitados.

lunes, 13 de mayo de 2024

Refranes contra la guerra

1.- La guerra no vemos y ya la tenemos. Supongo que se refiere a que sin darnos cuenta ya tenemos la guerra encima, o más profundo todavía, que no hay tanta diferencia entre la paz y la guerra y que por lo tanto, orgüelianamente, war is peace, y viceversa: peace is war. Me recuerda a Calino de Éfeso (En paz creéis estar pero la guerra domina toda la tierra) y a Heraclito: "La guerra es el padre de todas las cosas..." (Pólemos, que es el nombre de la guerra en griego, tiene género gramatical masculino, de ahí que sea el padre y no la madre, pero en el fondo viene a ser lo mismo).
 
2.- Quien guerra quiera, en ella muera. Sin muchos comentarios. A nosotros, los de abajo, nos gustaría ver cómo los de arriba, esos que tanto nos llaman ahora a las armas, están dispuestos, ellos y sus hijos, a morir en ella los primeros. 
 
 
 
 
3.- No quiero matar a Alí, ni que Alí me mate a mí. Expresión popular de quien no quiere la guerra y, por lo tanto, no quiere matar ni quiere morir en defensa de la patria o de cualesquiera otras ideas. El nombre de Alí quizá nos retrotrae a las guerras de religión entre moros y cristianos, por lo que sería la expresión de un cristiano que no quiere ni matar a los moros ni que los moros lo maten a él. 
 
4.- Cuando Marte llama a la lid, Minerva se echa a dormir. No es un refrán popular propiamente dicho, sino culto por las alusiones mitológicas a la cultura clásica que conlleva: Marte para los antiguos romanos era el dios de la guerra, minimizada aquí con el nombre de “lid”, y Minerva la diosa de la sabiduría, por lo que en la vieja disputa entre las armas y las letras viene a decir este refrán que en época de guerra, no se cultivan las letras, o las letras enmudecen, o como dice el siguiente, con palabras más comunes:
 
5.-...Cuando truenan los cañones, no se escuchan (o no hay oídos para o enmudecen) las razones. No se olvide el lema de ultima ratio regum, la "última razón de los reyes", que Luis XIV, el rey de la Francia al que se atribuye la identificación con el Estado ("El Estado soy yo") mandó grabar en sus cañones para dar a entender que la fuerza bruta de la bomba era el último argumento del poder, y el primero también de algún modo, dada la amenaza que supone recurrir a la razón de la fuerza  más que a la fuerza de la razón a cañonazos. Precisamente fue la invención y el desarrollo de esta terrible arma, el cañón, lo que permitió a los poderosos del mundo mantener su dominio. 
 
 
6.- Al hombre la espada, a la mujer la rueca. ¡Cómo han cambiado los tiempos, madre mía! La espada, ese símbolo fálico, ya no es atributo de los caballeros andantes, sino también de las damas, que, haciendo realidad el mito de las amazonas o mujeres guerreras de la antigüedad, que prescindían de los varones porque ellas mismas se habían varonizado y adquirido varonilidad, por así decir, so pretexto de no discriminación sexual, se equiparaban así a los varones y tomaban la espada voluntariamente abandonando la rueca y el telar. Resulta curioso, a propósito, cómo se ha democratizado la guerra y cómo se está planteando en la vieja Europa, raptada por el toro bravío de lidia de la OTAN, la conveniencia de volver al servicio militar obligatorio, sin discriminación sexual: es decir al reclutamiento forzoso de hombres y mujeres en edad de empuñar las armas como sucede en el Estado modélico de Israel. 
 
7.- Las armas tienen por objeto y fin la paz, que es el mayor bien que los hombres pueden desear en esta vida. Más que un refrán, es una cita literaria del ilustre don Miguel de Cervantes.Saavedra (1547-1616), olvidando que el mayor genio de nuestras letras no está diciendo "esta boca es mía", sino retratando al ridículo, entrañable y loco personaje de don Quijote, que evoca, por su parte, sin citarlo por su nombre propio, al filósofo Aristóteles que tanto daño ha hecho a la humanidad escribiendo en su Política (Libro VII, 1334a) por ejemplo “El fin de la guerra es la paz» (Literalmente: τέλος γάρ, ὥσπερ εἴρηται πολλάκις, εἰρήνη μὲν πολέμου, σχολὴ δ᾽ ἀσχολίας:  Pues la finalidad, como se dice muchas veces, de la guerra es la paz, y el ocio del negocio, donde viola el principio lógico de no contradicción que formuló en otra ocasión. Sigue Cervantes, pero no es el manco ilustre de Lepanto, sino su loco don Quijote, diciendo: “Esta paz es el verdadero fin de la guerra, que lo mesmo es decir armas que guerra.” 
 
 

 

domingo, 12 de mayo de 2024

AstraZeneca se retira

    La empresa farmacéutica británico-sueca AstraZeneca ha detenido la producción y suministro de su producto estrella contra la enfermedad del virus coronado cosecha 2019, que deja de comercializar. La propia empresa, según informó Telegraph, había reconocido una semana antes que su vacuna podía causar trombocitopenia trombótica en algunos casos. 

     Pero esto que se nos dice ahora no es ninguna novedad. Ya se sabía en 2021, cuando más de veinte gobiernos nacionales abandonaron dicho producto debido a los coágulos de sangre que provocaba. Ya entonces se decía que esta vacuna era la “mala”, -la que se suministró en España a trabajadores "esenciales" menores de cincuenta y cinco años -profesores, sanitarios, policías, funcionarios...- frente a la “buena”, que era la otra, la de  Pfizer. Es verdad que España dejó de inyectarla, aunque, desgraciadamente, siguió inyectando las otras, las que empleaban la técnica de ARN mensajero, no menos tóxicas y peligrosas.
 
    Lo que viene a decirnos la Agencia Europea de Medicamentos y la propia AstraZéneca es que las vacunas de vectores virales (como Janssen y AstraZeneca) se han quedado obsoletas, por lo que deben ser reemplazadas por las homólogas de ARNm (como eran Pfizer y Moderna). Tanto las unas como las otras desencadenan una respuesta inmunitaria muy aparatosa, y que, en opinión de algunos científicos tachados enseguida de heterodoxos por decirlo suavemente, es básicamente tóxica, dado que en lugar de destruir el virus lo generan.

    Una de las primeras víctimas mortales, como ya informamos en su momento en La mejor de las vacunas, fue un cabo del ejército español de 35 años de edad, cuya muerte fue reconocida por la Ministra de Defensa, que sin embargo, siguió empecinada en animar a  la vacunación: “Desde el punto de vista médico hay que seguir vacunándose, hay que animarse y que todo el mundo se vacune”. Con la mención de la “vacuna” se refería a lo que algún periódico del ruedo ibérico como era el Periódico Global, alias El País, denominó “el fármaco anglosueco”, el preparado de los laboratorios AstraZeneca. 

    Nuestra ministra guerrera se refería con lo de "todo el mundo" a las personas jóvenes que no tienen riesgo porque están fuera de peligro. Esto es lo que dijo en el funeral del cabo: “Queríamos estar hoy aquí para transmitir nuestro agradecimiento, nuestro cariño, y, al mismo tiempo, pues para dar ese toque (sic) de que al virus lo tenemos que vencer y que la mejor manera de vencerlo, aunque haya momentos duros y dolorosos, es, precisamente, vacunarse.” Eso decía la Ministra, como si el suero de AstraZeneca fuera el Santo Grial o el Cordero de Dios que quita los pecados del mundo.

    El cabo se había inoculado voluntariamente, pero no nos engañemos con lo de “voluntariamente”. Como escribimos en su momento, voluntariamente  no es sinónimo de libremente, sino todo lo contrario. La voluntad es una de las altas instancias del alma humana, da igual que sea propia que ajena, y someterse a sus dictados merma nuestra libertad.

    Pero AstraZeneca se retira con la satisfacción de la misión cumplida y la conciencia más que tranquila, porque según sus propias estimaciones ha "salvado" más de seis millones y medio de vidas en el primer año de su uso, habiéndose suministrado más de tres mil millones de dosis en todo el mundo. 

Viñeta de Antón, publicada en El Correo el 29 de marzo de 2021.

      Cierto es que la vacuna se ha inoculado a miles de millones de personas en todo el mundo, y no se puede negar que se ha terminado la pandemia, pero ambos hechos no conllevan una relación de causa a efecto, sino que nos hallamos ante lo que se llama la falacia lógica del “post hoc ergo propter hoc” -después de esto, por causa de esto”-, consistente en que cuando se produce un suceso después de otro, se considera que el segundo es consecuencia del primero: el gallo suele cantar antes de que amanezca, ergo: el canto del gallo es el causante de que salga el astro rey y que alboree.

    El hecho de que se aplicara en las Españas en una franja de edad donde no había mayor peligro de morir a causa de esa enfermedad, entre los 18 y los 55 años ayudó a que se considerara que había salvado esas vidas que, por otra parte, no corrían ningún peligro, salvo la del citado cabo del ejército, que murió a causa de ella. 

sábado, 11 de mayo de 2024

El ojo de Dios

    Hay que protestar como sea, cuando sea y donde sea por la excesiva vigilancia a la que estamos siendo sometidos por el Gran Hermano (el Gobierno del Estado orgüeliano en que se ha convertido el universo mundo) y los Pequeños Hermanos del sector privado (las empresas en nuestro puesto de trabajo, que no se quedan mancas, por no hablar de los centros de estudio) por nuestra propia seguridad, según dicen, y nuestro propio bien y bienestar. 
 
  
    Estado y Mercado, siempre de la mano, se unen en perfecto matrimonio o concubinato para mantenernos bajo perpetuo control, monitorizados y controlados, constituyendo el Ojo de Dios una sagrada trinidad pública, privada y concertada que quiere verlo todo, si no lo ve todo ya. 
 
 
    Ese Ojo de Dios con el que aterrorizaron mi infancia metido en un triángulo equilátero, supongo que por aquello de la santísima trinidad lo de los tres lados iguales. Era un ojo que decían que todo lo veía, panóptico. No se le escapaba nada. ¡Cuidado con lo que haces, niño! Dios te vigila. No te toques, que Dios te ve. 
 
 
    Ese ojo, que como cantó Machado no es ojo porque nosotros lo veamos sino porque él nos ve a nosotros, son las cámaras de videovigilancia instaladas por donde quiera y que funcionan día y noche durante las veinticuatro horas que dicen que tarda la Tierra en dar una vuelta completa sobre su propio eje, el ojo que controlan el reality show de nuestra vida cotidiana convirtiéndola en existencia anodina y gris, en un espectáculo serial televisivo, porque eso y no otra cosa es la realidad: el espectáculo. 
 
¿Qué miras?, Banksy
 
    Pero no se queda ahí la cosa: el ojo de Dios no se limita a vernos y fotografiarnos y filmarnos, sino que sabe quién somos, nos conoce y nos reconoce gracias a la posesión de nuestros datos biométricos, la nueva ficha policial, y si nos descuidamos hasta nuestro historial médico -¿dónde está la cacareada protección de datos?-, a través del reconocimiento facial, dado que la cara ha venido a ser, como se sospechaba, el espejo del alma individual. 
 

viernes, 10 de mayo de 2024

Judit y Holofernes

    He aquí un nuevo soneto de Giuseppe-Gioachino Belli, de temática bíblica en esta ocasión. Se titula La bbella Giuditta, "La bella Judit", y narra el episodio en el que Judit, una rica viuda de Betulia, libra a su ciudad del asedio del general asirio Holofernes acostándose con él y, después de hacer el amor, cuando él se hubo dormido, cortándole la cabeza de un tajo con la cimitarra. 

    Los once primeros versos del soneto resumen el capítulo 13 del Libro de Judit, y en la última estrofa el poeta reflexiona cómo se puede matar por la fe, como sucedía en la Roma papal, tal como hacía el verdugo Mastro Titta, que aparece mencionado en el verso séptimo, que era el apodo de Giovanni Battista Bugatti (1799-1869), el último sayón del Estado Pontificio, quien entre 1796 y 1864, según comenta Luigi Giuliani en su traducción de Belli, ejecutó a 516 condenados a muerte "por la fe", es decir, por no tenerla.   

    Llama la atención el verso octavo, donde se dice que Judit mandó a Holofernes después de haberle cortado la cabeza -la decapitación, más que un símbolo de la castración como quieren los clásicos del psicoanálisis, es la suma castración- a "joder coños eternos". En otro soneto de Belli "La madre de las santas" se equipara la vulva con la sepultura del hombre  (la fica è seportura).   

 La bbella Gbiuditta

Disce l'Abbibbia Sagra che Ggiuditta
doppo d'avé ccenato con Llionferne,
smorzate tutte quante le luscerne
ciannò a mmette er sordato a la galitta,

che appena j'ebbe chiuse le lenterne
tra er beve e lo schiumà della marmitta,
cor un corpo da fìa de Mastro Titta
lo mannò a ffotte in ne le fiche eterne,

e cche, agguattata la capoccia, aggnede
pe ffà la mostra ar popolo ggiudio
sino a BBettujja co la serva a piede.

Ecchete come, Pavoluccio mio,
se pò scannà la gente pe la fede,
 e ffà la vacca pe ddà ggrolia a DDio.
 
 
Judit y Holofernes, Caravaggio (1598-1599)

La bella Judit

  Diz' la Santa Biblia que Judit, bella,
tras haber con Holofernes cenado,
habiendo las lámparas apagado,
metió el canario de él en jaula de ella (1),

que a penas hubo el ojo el rey cerrado
tras el polvo y vino de la botella,
con tajo de verdugo lo degüella,
  a joder coño eterno encomendado,

y que, arrancada la cabeza, fue
para mostrársela al pueblo judío
hasta Betulia con su sierva a pie.

Aquí tienes cómo, Paolo mío,
se pue' matar en nombre de la fe
y darle gloria a Dios con puterío.
 
(1) Literalmente dice "metió el soldado en la garita", aludiendo con ambos términos al pene y a la vulva.

Judit decapitando a Holofernes, Artemisia Gentileschi (1613)

jueves, 9 de mayo de 2024

Asturias de mis amores

    Asturias se convertirá este año, si Dios no lo remedia y me temo que no va a remediarlo, porque el dios al que me refiero y al que así se honra es el viejo dios de la guerra, Ares o Marte, bajo la advocación actual de Dios de Defensa, en la sede de la celebración del Día de las Fuerzas Armadas que se alarga a tres  días: 22, 24 y 25 de mayo.  Allí resonará, al ritmo del Asturias, patria querida y al son de la gaita y el tambor, el alalá o alalé, la vieja grita onomatopéyica de combate, hija que era de la guerra misma, la voz ejecutiva que nace del fragor de las armas y del ardor guerrero.

    Gijón acogerá la revista aeronaval, que para eso es puerto marítimo. En la playa de San Lorenzo se realizará un desembarco y una operación simulada, y las calles de la capital del principado, por su parte, contemplarán el desfile terrestre el sábado.

   Vetusta, la ilustre ciudad que dormía la siesta, será despertada entre otras atracciones, por el desfile marcando el paso al ritmo de la música militar de los tanques acorazados Leopard(o), como los diez que regaló nuestro gobierno progresista a Ucrania para sostener y que progrese su guerra contra Rusia, y no faltará la mascota de la Legión, que este año es un borrego, por algo será, de dos años llamado "Baraka", que resulta así enternecedor.
 
 
    Se prevé la participación de más de 5.500 uniformados de los dos ejércitos, de la Armada y de la Guardia Civil, y la presencia del Rey de las Españas. El Día de las Fuerzas Armadas se triplica así en dos jornadas: una dedicada al ejército del aire y a la armada, y otra al de tierra. Pero no se queda ahí la cosa. Al parecer el evento arrancará el miércoles 22 con diferentes actos y exhibiciones en ambas ciudades asturianas, buscando "subrayar la identificación de los ejércitos con el pueblo español, del que forman parte y al que sirven», todo ello fomentando unas jornadas de encuentro y comunicación entre ciudadanos, tanto civiles como militares, para acentuar su recíproca comprensión.
 
    Sobrevolarán aviones que pintarán los cielos asturianos con los colores de la bandera rojigualda.  Con la bandera, que es el símbolo de la patria, se homenajeará a los que dieron su vida por España, y, con ello de paso, al hecho en sí de morir por la idea de la patria, haciendo que la vida, que carece habitualmente de sentido, adquiera uno con la ofrenda de su muerte sacrificial.
 
 
       Y se oirá, mezclado con las gaitas, el antiguo alalá, alarido o grita de batalla que hace enmudecer a los que lo escuchan, que es el grito o clamor grande de la tropa al entrar en la batalla. De este modo resonarán las viejas palabras de Píndaro, que rezan así en la lengua de Homero: Κλῦθ᾿ Ἀλαλά, Πολέμου θύγατερ, / ἐγχέων προοίμιον, ᾇ θύεται / ἄνδρες ὑπὲρ πόλιος τὸν ἱρόθυτον θάνατον. «¡Escucha, Alalá, hija de la Guerra, preludio de las lanzas -o si se prefiere, de las espadas-, a quien se entregan los hombres en su condición de soldados, en nombre del Estado, en santa ofrenda de muerte sacrificial»!
 
Marte, dios de la guerra, guiado por Alalá, Wenceslaus Hollar (1607-1677) 
 
    ¿Celebraremos alguna vez no durante unas jornadas como estas sino durante todos los días del año el día de las Fuerzas Desarmadas, el desarme y el armisticio o suspensión de las actividades guerreras no como tregua temporal sino con carácter general definitivo?