sábado, 16 de agosto de 2025

No hay libertad en Granada

Mira que es bonita la ciudad de Granada, con su Alhambra, su aroma de naranjos en flor, sus gentes amables, su Albaicín, su nieve a lo lejos en las cumbres de Sierra Nevada, sus gitanas leedoras de buenaventura que te ofrecen una ramita de romero y te penetran con su sonrisa y su mirada, sus estudiantes que derrochan juventud a raudales, rebeldía, inconformismo frente a los roles establecidos por la sociedad y deseos de probarlo todo. 
 
Mira que es bonita y resulta que, con lo bonita que es, van y nos quitan a los granadinos y a los forasteros que estamos aquí de paso la poca libertad que tenemos. Mira que todo era posible en Granada, y a partir de ahora si nos descuidamos no se va a poder vivir libremente.
 
El Gran Hermano quiere controlar la convivencia entre personas, toda relación y actividad social en la ciudad de Granada y evitar que no haya negocio que se realice fuera de lo establecido por el Ayuntamiento, quien confiere a la policía local la potestad de decidir qué relaciones entran dentro de lo que se entiende por una "correcta convivencia". 

Por orden del señor alcalde, o de la señora alcaldesa, vaya usté a saber, elegidos democráticamente, por supuesto, queda prohibida tajantemente toda manifestación de arte espontáneo sin un permiso del ayuntamiento y una licencia municipal,  so pena de sanción y requisa de instrumentos, material y ganancias. 
 
Queda prohibido, por orden de la alcaldía, dormir en la calle al sereno las noches de luna llena, y cualquier petición de limosna. Se pretende acabar así con la pobreza prohibiendo la mendicidad. 
 
Según el bando municipal, queda prohibida "toda muestra de actividad sexual (da igual si no hay dinero de por medio)", quedando la valoración de qué es "actividad sexual" al Policía Local de servicio. Ten cuidado si das un beso a tu pareja, si le metes mano en un banco del parque, o le tocas la entrepierna en la calle porque puedes enfrentarte a importantes sanciones. 
 
Queda prohibido el "trabajo del sexo si este es visible". La prostitución sólo será considerada falta muy grave si se ejerce en el centro de la ciudad o cerca de centros educativos. Si las prostitutas están alejadas y no molestan, si no se ven, entonces sólo serán faltas leves...
 
Prohibido "repartir panfletos o documentos de cualquier tipo en la calle", "así como pegar carteles". 
 
No podemos quedarnos impasibles ante una normativa que reduce las libertades ciudadanas aún más, que atenta especialmente contra la libertad de expresión y que lleva a un nuevo nivel el proceso de infantilización social que padecemos y excluye aún más a los ya excluidos. 
 
No hay libertad en Granada, ni en ninguna otra ciudad del mundo, claro está. Granada no es más que un nombre propio de cualquier otra ciudad, como Gijón, Nueva York o como Berlín. 
 
 
No es nuestro mundo. No queremos que ese sea nuestro mundo. No es el que llevamos en nuestros corazones. Debemos recuperar urgentemente las calles, retomar Granada, reconquistarla, aunque no manu militari como hicieron los Reyes Católicos el 2 de enero del año del Señor de 1492 tras un largo asedio una vez rendido Boabdil; debemos liberar Granada de los que la conquistaron y quieren tomarnos ahora a nosotros como rehenes.

viernes, 15 de agosto de 2025

Entre dimes y diretes

Ay de mí, se quejaba el poeta Teógnide en un dístico elegíaco de la juventud y la maldita vejez, porque esta se le echaba encima y aquella se iba sin remedio.

  A las olas de calor de este verano se suma la ola de incendios devastadores por obra del fuego... extremo, último hallazgo terminológico del Periódico Global.

 Una mujer fue detenida en Marruecos y acusada de blasfemia religiosa por posar con una camiseta que rezaba “Alá es lesbiana” o sea, Dios es mujer y homosexual.

  Ha sido detenido y puesto a disposición judicial el bombero forestal pirómano, presunto autor del incendio que arrasó dos mil doscientas hectáreas de bosque.
 
El Ministerio del Interior declara la Fase de Preemergencia en Situación Operativa Uno del Plan Estatal de Emergencias ante los numerosos incendios forestales.

Ante los incendios unos vecinos son confinados y otros son desalojados. Preventivamente. Mientras tanto, arde España, pero no se quema. Como todos los veranos.

 
 La ministra de Medio Ambiente afirma que los incendios forestales alimentados por la ola de calor extremo son los peores desde que hay registros registrados.
 
Contra incendios forestales hay remedios naturales: hatajos de cabras evitan que se queme el bosque ramoneando hierba seca, ramas bajas y arbustos inflamables.

 

 Exhuman al cabo de cincuenta años como burdo espantajo el cadáver del dictador con la fanfarria pedagógica de la memoria histórica a fin de, muerto, combatirlo.
 
Etimología de 'tosco': En el barrio etrusco o toscano de Roma estaban, según Plauto, los  hombres que se vendían a otros hombres, centro prostibulario masculino.
 
A las consabidas olas de calor estival se suman ahora oleadas de xenofobia u odio a los extranjeros, tildados injustamente de forasteros, forajidos y foráneos. 

“Un hombre, tras recibir varios disparos de un arma de fuego, muere en plena calle y a pleno sol (el termómetro marcaba cuarenta grados) por un golpe de calor”.

 
La fiesta de moros y cristianos de Villajoyosa se pretende 'diversa y sin elegetebeifobia': en el cartel un moro y un cristiano, en vez de pelearse, se morrean.
 
 
 Reza un adagio hallado en un códice medieval: 'Verba, fides, facta mundi sunt omnia falsa': Las palabras, la fe y los hechos del mundo son, todos, falsedades.
 
  Ochenta años después de la explosión de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki, la industria armamentista sigue siendo sin duda el motor económico mundial. 
 
-No son molinos de viento, amigo Sancho, fiel escudero, esos que ves allá en Benavieja, sino catorce desaforados gigantes contra los que me lanzo a la batalla.

  

jueves, 14 de agosto de 2025

Barba non facit philosophum

    La barba no hace al filósofo, decían los antiguos, cuando las barbas eran características de sabios, filósofos y sofistas griegos sobre todo. Podríamos decir hoy también, frente a la moda juvenil masculina: la barba no hace al hombre. Ambos dichos vienen a decir lo mismo que el proverbio medieval que reza: habitus non facit monachum: 'el hábito no hace al monje'. La túnica y la capucha, en efecto, no hacen al fraile pero le confieren la apariencia de serlo.

     Los islamistas radicales de Somalia, adoctrinados por las sagradas escrituras del Corán que ellos interpretan a su manera y veneran al pie de la letra, y sobre todo por los hadices o dichos atribuidos al Profeta, consideran que no llevar barba da un aspecto afeminado a los varones y que las enseñanzas de Mahoma obligan a no recortarla más allá de un puño. Afeitarse la barba, para ellos, es una forma de mutilación masculina, de castración fálica, de renuncia a la virilidad que un hombre debe presentar. 
 
    En nuestro mundo occidental la tradición del afeitado la impusieron los romanos, frente a los griegos, que se dejaban crecer las barbas. Entre los emperadores romanos el afeitado fue la norma hasta Adriano, que, filohelénico hasta la médula, se dejó crecer la barba e impuso esa tendencia entre la aristocracia romana y los emperadores que le siguieron. 
 
    Aunque la moda de las barbas ha ido y venido según los tiempos, y sigue yendo y viniendo, parece que la costumbre occidental más extendida es el rasurado por la publicidad y la tradición, pese  a la tendencia actual de la juventud masculina de dejarse la barba. El rasurado nos da un aspecto a los varones de afeminados, de mujeres, de niños, de efebos imberbes, es cierto, porque queremos alejarnos del mono, dejar de parecernos a él, y el vello es lo que más nos acerca a él. Las barbas nos aproximan también al oso velludo y ya se sabe lo que solía decirse: el hombre y el oso, cuanto más feo más hermoso. 
 
Busto del emperador Adriano
 
     Con la barba islámica sucede un poco lo mismo que con el velo en la cabeza que cubre el cabello de las mujeres: no es, al parecer, uno de los pilares obligatorios del islam, aunque esté prácticamente generalizado, como sí lo son sin embargo la oración cinco veces al día y el ayuno durante el mes de Ramadán. 
 
    La mayoría de las autoridades religiosas musulmanas, ya sean chiítas o sunitas, llevan barba a imitación del Profeta. Sin embargo, en Egipto, Jordania y Turquía pueden encontrarse algunos imanes que se afeitaban las barbas, hecho que en la década de los sesenta y setenta del siglo pasado se convirtió en un símbolo de modernidad. Pero para aquellos que quieren seguir al pie de la letra las enseñanzas del Profeta, los hadices ofrecen pautas de cómo recortar la barba y mantenerla hermosa.
 
    Hizbul Islam, el partido islámico somalí, llegó a decir que dejarse la barba era una lección moral del profeta Mahoma y que era un deber mantener viva esa práctica y castigar a los hombres que se afeitaran la barba y dejaran crecer el bigote. Cualquiera que violara esa norma afrontaría las consecuencias según dicta la ley islámica mediante latigazos, amputaciones o la muerte.    
 
  
    ¿Qué dirán esos integristas islámicos de los hombres que no sólo se afeitan las barbas, sino de aquellos que se depilan los vellos de piernas, brazos, pechos, sobacos, nalgas y espaldas? ¿Qué dirán de aquellos que, practicando una depilación más íntima, se rasuran el vello púbico para dejarse unas ingles brasileñas? ¿Qué dirán de los bonzos? ¿Qué dirán de las mujeres barbudas? ¿Las obligarán a llevar barba también o a afeitarse o a ponerse el burca o a qué? 

    Las mujeres occidentales, salvo las nórdicas que son más rubias, se depilan las piernas o se decoloran los vellos cuando son muy oscuros, para que no se vean; si no lo hicieran sus piernas velludas parecerían las de un futbolista. 
 
    Estas modas pasajeras no deberían constreñir por la fuerza a nadie, y de hecho en Occidente no lo hacen, pero no por ello dejan de extenderse y generalizarse.
 
     Que cada cual haga de su capa un sayo, y que nos dejen en paz estos talibanes islámicos y todos los integristas en general, que también los hay cristianos y laicos, y son igual de perniciosos los unos que los otros, porque el problema, lo malo digamos, no es la fe islámica concreta que ellos profesan, sino la profesión de cualquier fe, ciegas que son por esencia todas y cada una de ellas y obcecadoras vendas que nos ponemos en los ojos. 

miércoles, 13 de agosto de 2025

Doctores tiene la Ciencia

Cuando alguien nos pregunta si creemos en alguna otra cosa, además del Credo in unum Deum, o sea el credo en el único dios verdadero, engendrado no creado, que está mandado y que es el dinero, la única religión que no tiene ateos, nos pone en el aprieto de no saber qué responder muy bien, por lo que muchos recordando nuestra etapa de catecúmenos adoctrinados por el catecismo del padre Astete en la catequesis previa a nuestra primera comunión, respondemos que sí, no vaya a ser que nos acusen de negacionistas si decimos que no. Y acto seguido añadimos: Creo en todo lo que cree y enseña la Santa Madre Iglesia Católica, Apostólica y Romana.
 
Si el inquisidor insiste preguntando: “¿Qué cosas son esas?”. Nuestra respuesta catecúmena nos viene enseguida a la cabeza: Eso no me lo pregunte usted a mí, que soy ignorante. Doctores tiene la Santa Madre Iglesia que os sabrán responder
 
Cambiando un poco las tornas de la Iglesia Católica, Apostólica y Romana por su versión contemporánea y laica, que es la Iglesia de la Ciencia, respondemos, mutatis mutandis, a la primera pregunta secularmente: Sí, creo en todo lo que cree y enseña la Ciencia. Y a la insidiosa pregunta segunda: ¿Qué cosas son esas? Reconoce uno su ignorancia al modo socrático, pero no nuestra falta de fe, y decimos: Doctores tiene la Santa Madre Iglesia de la Ciencia, que viene a ser lo mismo que: Expertos y científicos tiene la Ciencia que os sabrán responder
 
Y es que como le dijo don Quijote a su fiel amigo y escudero Sancho Panza: Hemos topado, Sancho, con la iglesia, y con sus ministros, y con sus leyes, y con sus potestades. Esos expertos están cada vez más especializados en sus especiales especialidades, porque los demás somos unos ignorantes de tomo y lomo, pero no nos falta la fe, una fe de carboneros, como la de los viejos creyentes.

martes, 12 de agosto de 2025

Efecto mariposa (dando en el clavo)

Así han glosado algunos el llamado "efecto mariposa" de la teoría del caos: “El aleteo de una mariposa que vuela en la China puede producir un mes después un huracán en Texas”. El aleteo representa un pequeño cambio en las condiciones iniciales del sistema, que desencadena una serie de acontecimientos que provocan fenómenos a gran escala. 
 
Si la mariposa no hubiera aleteado, la trayectoria del sistema podría haber sido completamente diferente. Einstein, a su modo, dijo lo mismo con otras palabras mucho más bellas; a fin de cuentas, era un matemático o, lo que es lo mismo, un poeta: “Hasta la más pequeña gota de rocío caída del pétalo de una rosa al suelo repercute en la estrella más lejana”. 
 
A veces un fenómeno insignificante, una palabra inconveniente en un momento inoportuno, por ejemplo, puede desencadenar grandes tempestades. Dadme una palanca, dijo el griego, y moveré el mundo. Algo tan nimio aparentemente como una palanca puede levantar un peso enorme sin necesidad de un grandísimo esfuerzo muscular… 
 
Es la moraleja que se desprende de la cantilena infantil popular inglesa For the want of a nail ('Por la falta de un clavo'), cuya versión escrita más temprana es la de John Gower, que remota aproximadamente a 1390. 
  
For the want of a nail the shoe was lost. 
For the want of a shoe the horse was lost. 
For the want of a horse the rider was lost. 
For the want of a rider the battle was lost. 
For the want of a battle the kingdom was lost. 
And all for the want of a horseshoe nail. 
 
De la que me atrevo a hacer una versión, que dice así: 
 
Por la falta de un clavo perdió la herradura,
por faltar la herradura perdióse el caballo, 
por faltar el caballo perdióse el jinete, 
por faltar el jinete perdió la batalla, 
por faltar la batalla perdióse el imperio, 
y todo se echó por la falta de un clavo a perder.

Lágrimas de san Lorenzo

 

Mediada ya la noche, / la luna llena / de agosto alumbra el cielo, / Selene espléndida. 

Una infinita lluvia / cae de estrellas. / ¿Son las lágrimas, acaso, / benditas perlas

de san Lorenzo asado / a viva fuerza / en la parrilla ardiendo, / sin una queja

que, tostado de un lado, / Dios no lo quiera, / le dice a su verdugo: / "Dame la vuelta"?

  

El martirio de san Lorenzo, Tiziano (1558)

 ¿Rutilantes, fugaces, /son las Perseidas / que en la noche deslumbran / con sus estelas? 

¿Es un meteorito, / o es un cometa / que se deshace roto / y desmelena? 

¿Son restos de un incendio, / chispas, pavesas, / destellos luminosos / que centellean? 

¿O es chatarra lanzada / al espacio, fuera, / cohetes y satélites, /sombras chinescas? 

¿Son fuegos de artificio? / ¿Son las ideas, / conceptos que forjados / se desintegran? 

Saber, nada sabemos / a ciencia cierta, / ni lo que fue o lo que es, / ni lo que sea. 

lunes, 11 de agosto de 2025

Sierpes veraniegas

Tras El virus asesino llega a nuestras pantallas El calor criminal, que mata implacable a treintayún españoles cada día en lo que llevamos ya de tórrido verano.
 
Mucha gente padece ansiedad climática o estrés térmico, fenómeno nuevo que hace del cambio climático el eje central de su vida por su fuerte impacto emocional.
 
Bella Vista, David Hockney (1937-...)
 
Últimas noticias: Hace cinco mil setecientos años se celebró un banquete caníbal en Atapuerca, Burgos, en el que once de nuestros antepasados fueron engullidos.
 
La Ley de Servicios Digitales de la UE impone la censura preventiva a las plataformas so pretexto de lucha contra los discursos de odio y la desinformación.
 
Me ha despertado el rayo de luna llena que entraba por el ventanal en mitad de la noche, creyendo yo sin escuchar el canto del gallo que era ya de madrugada.
 
 ¿Zeus, que se había transformado a la sazón en toro blanco, abdujo a Europa o fue Europa la que sedujo al toro que era el dios a fin de, arrebatada, liberarse?
 
  
¿Cómo puede verificar uno, por ejemplo yo mismo, como exige la página digital, que soy un ser humano y no otra cosa como un engendro autómata mecánico o robot?
 
La Magna Industria de Confección de Fármacos, cuando no nos hace creer que estamos enfermos, nos enferma de verdad para vendernos ipso facto sus medicamentos. 
 
En vez de ¡Oh loca fantasía / que fabricas palacios en el viento!, el poeta que llevaba dentro prefirió: ¡Oh loca fantasía / que palacios fabricas en el viento! 
 
El cambio climático que dicen los meteorólogos que padecemos es un caldo de cultivo ideal para ciertas enfermedades, lo que hace aún más necesarias las vacunas. 
 

 Concluía Samaniego su célebre fábula de La Lechera con esta moraleja: No anheles impaciente el fin futuro: / Mira que ni el presente está seguro. ¡Ni el pasado!

 

 La fabulada codorniz de Samaniego, libre hasta poco ha, lamenta, arrepintiéndose ya, haber caído por un grano de trigo presa en la trampa de un lazo corredizo.


domingo, 10 de agosto de 2025

Reventón Térmico

    En verano hay pocas noticias, y los periódicos diarios tienen que salir todos los días, como su nombre indica, por eso recurren a las serpientes de verano: el monstruo del lago Ness o el canibalismo de nuestros ancestros de Atapuerca, por poner un ejemplo ya clásico y otro muy reciente. 
 
  
    En verano no hay liga de fútbol, las Cortes, tanto la cámara baja o parlamento de diputados y diputadas como la alta o senado de senadores y senatrices, disfrutan de sus merecidas vacaciones, lo mismo que los parlamentos autonómicos de las diecisiete Españitas y todos los ayuntamientos y consistorios municipales. ¿De qué vamos a hablar? ¿Del tiempo? No, de la climatología, que es más científico.
 
    No pasa casi nada, nada más que el verano, salvo algún reto viral de defecar en las piscinas o la práctica del balconing consistente en tirarse los turistas británicos alcoholizados por los balcones del hotel a la piscina. Por eso cuando coincidimos con el vecino en el ascensor y no tenemos nada de qué hablar recurrimos al trending topic de las olas de calor como la sufrida en la Vetusta de Clarín el pasado 8 de agosto de 2025: 23 grados centígrados a las 12,45 horas del medio día, achicharrante. 
 
23ºC en Oviedo a las 12:54 horas el 8 de agosto de 2025.  
  
    No pasa nada, salvo el verano, y por eso la noticia son las sucesivas olas de calor que se presentan con un lenguaje apocalíptico y se califican de “infernales”, "tropicales", "tórridas" y “catastróficas”. Como no hay noticias y como tiene que haberlas, los periodistas se las inventan. El miedo en este trance es harto socorrido. 
 
    Por eso ahora que el Río Sequillo, haciendo honor a su nombre, no lleva agua en su cauce, es decir, durante el estiaje que amarillea verdes prados y praderas provocado por la pertinaz sequía, ya no hay tormentas de verano, que es algo muy anticuado que no sorprendería a nadie porque siempre hemos oído hablar de ellas, sino algo mucho más inaudito y novedoso.
 
    Lo ha dicho la televisión: ahora hay "reventones térmicos", porque la climatología, que ya no da nada más de sí después de las DANAs, está que revienta: reventona. 
 
    Reventón es la acción y el efecto de reventar, destrozarlo y desbaratarlo todo no sin violencia. Al reventón le aplicamos el adjetivo culto de “térmico”, y ya tenemos climatología al canto para caso de emergencia.  
 
 
    Según la televisión omnipresente, la confluencia del aire frío de la atmósfera con el caliente de la corteza terrestre provoca dichos desajustes térmicos. Las comunidades autónomas están en alerta por temperaturas máximas, por lo que los meteorólogos advierten de los reventones que se pueden registrar en las Españas en plena ola de calor sin previo aviso. 
 
    Un reventón térmico (heat burst o microburst) es un fenómeno meteorológico peligroso caracterizado por una fuerte corriente descendente de aire, a menudo asociada a tormentas, que puede causar daños significativos debido a las fuertes ráfagas de viento que genera al chocar con el suelo. Se produce cuando una masa de aire frío y denso desciende desde una nube y se expande radialmente al impactar la superficie. 
 
  
    Estos "nuevos" fenómenos térmicos, más viejos que el catarro de Matusalén, son difíciles de predecir con precisión, incluso para los expertísimos meteorólogos de la AEMET, lo que aumenta su peligrosidad, generando vientos tan intensos y tan potentes como los de un tornado -la diferencia radica en el patrón radial o lineal del reventón, mientras que los tornados tienen un patrón curvo- causando daños tanto a las personas como a las cosas y bienes de las personas, pudiendo ser húmedos, con precipitaciones, o secos, si el chubasco se evapora antes de llegar al suelo.  

sábado, 9 de agosto de 2025

Hexámetros dactílicos

    Se llama hexámetro dactilico al verso que consta de seis unidades de medida o pies métricos cuyo ritmo recuerda la secuencia cartilaginosa del dedo o dáctilo -una falange gruesa y dos más delgadas que valen por una-, o sea una sílaba marcada con el ictus o golpe rítmico y un intervalo de una o dos sílabas no marcadas en principio, una sola en el sexto pie. 
 
    Los ensayos de hexámetros dactílicos en castellano de poetas como Salvador Rueda y Rubén Darío pecaron de ser siempre holodáctilos, es decir, versos de diecisiete sílabas que incurrían en la doble monotonía del isosilabismo y de la repetición de una sílaba tónica seguida de dos átonas excepto en el último pie; así, por ejemplo, este hexámetro de Rueda: “Entre el sopor de la siesta que duerme Galicia lozana” o este horrísono de Darío: “Ínclitas razas ubérrimas, sangre de Hispania fecunda”. 
 
Los hexámetros griegos y latinos, sin embargo, admitían en los cuatro primeros pies del verso una doble realización: podían ser dáctilos puros -una sílaba macada rítmicamente seguida de dos no marcadas- o sustituirse por espondeos -una sílaba marcada seguida de otra no marcada-, mientras que el quinto pie se realizaba generalmente como dáctilo y el sexto como espondeo, lo que recuerda en música a un compás de 4/4 o de compasillo, donde el primer tiempo está constituido siempre por una blanca que vale 2, y el segundo por dos negras, que valen 1 cada una, o una blanca. Gracias a las sustituciones los hexámetros grecolatinos no tenían siempre el mismo número de sílabas, ya que oscilaban entre las diecisiete del holodáctilo y las trece del holospondaico, y en cuanto al esquema rítmico se rompía la monotonía al presentarse no una sola posibilidad de realización sino dieciséis posibilidades que, siendo distintas entre sí respondían sin embargo cabalmente al mismísimo patrón, y le conferían al verso mucha libertad. 
 
 
    Si leemos hexámetros griegos o latinos, el ritmo viene marcado por la alternancia de sílabas largas, que son las que en principio lo determinan, y breves, las que no, cosa que en nuestra lengua ya no sucede. La adaptación del hexámetro clásico de Homero o de Virgilio pasa por jugar con la alternancia entre sílabas acentuadas o tónicas, que son las que en principio marcan ritmo, y una sílaba o dos átonas o no portadoras de acento, que son las que no lo marcan, sin que sea necesario ni elegante que siempre coincidan, por otra parte, acento y tiempo marcado, pudiendo pasar lo contrario, que caiga algún acento en tiempo no marcado, a contratiempo, o que aparezca una sílaba átona marcando el compás, rompiendo la monotonía del verso, lo que no impide, sin embargo, que siga respondiendo al mismo esquema rítmico y sonoro, y que siga sintiéndose como el verso que es y no como la prosa. 
 
    Ofrezco un ejemplo en castellano de cada una de las diecisiete variantes poniendo entre paréntesis el número ordinal del pie, 1º, 2º, 3º, 4º, en el que se ha realizado en su caso la sustitución del dáctilo por el espondeo. Aunque los ejemplos que presento, sacados de aquí y de allá, presentan coincidencia entre frase y verso, es decir cada frase viene a recluirse en el marco de un verso, los hexámetros antiguos buscaban justamente todo lo contrario, que no coincidieran las frases con los versos, la unidad sintáctica con la métrica, encabalgándose suave- o abruptamente unos sobre otros en a veces largas tiradas, como en estos cinco primeros de la Odisea de Homero:  Cuéntame, Musa, del artimañero varón que hubo errado / mucho, después de arrasar el alcázar sagrado de Troya; / vio ciudades y el ser conoció de muchísimas gentes, / y hondas sufrió por el piélago en su alma penalidades / mientras bregó por su vida y retorno de sus compañeros.”   
 
Diecisiete sílabas (holodáctilo): 
Lento y pausado discurre su rítmico curso, sereno. 
 
Dieciséis sílabas (un espondeo): 
No me voy a callar, te diré que te quiero y te odio. (1º) 
Urbe voraz, gran bestia que todo devoras y tragas. (2º) 
Es por tu seguridad, enciérrate, ponte a cubierto. (3º) 
¿Hay una fe que se pueda creer que es buena? Ninguna. (4º) 
 
Quince sílabas (dos espondeos): 
Pasan todo el día mirando el reloj y fumando.(1º y 2) 
Corren, malos, los tiempos para la épica lira. (1º y 3º) 
¿Somos seres humanos o somos 'human resources'? (1º y 4º) 
¿Qué es lo que voy a ver en medio de cuatro paredes? (2º y 3º) 
No hay presidiarios, presos, reclusos: somos internos. (2º y 4º)
 ¿Cárcel, chirona, prisión? ¡No! Centro penitenciario. (3º y 4º )
 
 Catorce sílabas (tres espondeos):
 ¿Quién se esconde tras un nombre real pero falso?(1º, 2º y 3º) 
Sueño un cielo azul, de misiles libre y de drones. (1º, 2º y 4º) 
 Es muy fiero el Amor, un dios salvaje que hiere. (1º, 3º y 4º) 
Cruza la calle el zorro, añora el bosque lejano. (2º, 3º y 4º)
 
Trece sílabas (holospondaico): 
Corre, raudo ya y veloz, alzando su vuelo.

viernes, 8 de agosto de 2025

España está que arde (y II)

    Si nos apartamos del dogma climático  e incurrimos en el pecado de la desinformación y del negacionismo y sus promesas de redención y no nos sacrificamos reduciendo nuestras emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera, que son nuestro pecado original, la Iglesia de la Climatología nos excomulga. Los Sumos Sacerdotes, que divulgan los conocimientos de los estudios y modelos climáticos que realizan las predicciones acerca del futuro, dicen que si no hemos notado el aumento de 1,5 grados Celsius en la temperatura del planeta, ya  lo notaremos, porque va a seguir aumentando pavorosamente.

    La nueva religión tiene sus herejes, que confunden a los fieles creyentes. Ellos, entre los que me temo que me incluyo, dicen, decimos que no hay un cambio climático, sino dos: el calentamiento global o verano en el hemisferio norte y el simultáneo enfriamiento global o invierno en el hemisferio sur del planeta ahora mismo, y viceversa, porque ambos cambios climáticos son, como se sabe, alternativos. El nombre que se nos aplica es negacionistas de la evidencia científica, como denominan ellos a la fe 'verdadera' que nosotros negamos con nuestras palabras y argumentos.

    Afortunadamente hay una red mundial de verificadores de hechos, los fact checkers, que forman el Tribunal del Santo Oficio de la Inquisición que combate la herejía a fin de mantener la ortodoxia climática que se dedica a denunciarnos y perseguirnos a los herejes y a exigir que se nos destierre de todo medio de comunicación y red social, acusados de desviación de la fe y ultranegacionistas.

    No estamos minimizando aquí el peligro de los incendios forestales, Dios nos libre, sino ridiculizando el discurso de miedo que los medios de formación de masas constantemente nos inculcan para sembrar el 'climate panic' o 'climate anxiety' a fin de controlarnos. Como no les basta con el riesgo incendiario, que es la actualización de la amenaza del infierno aquí y ahora, que les parece poca cosa y de sobra conocida, nos amenazan, además, con trastornos mentales y conductuales derivados del impacto de las altas temperaturas. 

    La AEMET lanza un comunicado urgente advirtiéndonos de la ola de calor "para la que no estamos preparados". Y resulta que lo que viene no es solo la canícula habitual sino otro episodio más de propagación del miedo. Han pasado de difundir el miedo al virus y propagar el miedo a la guerra a difundir ahora el miedo a las olas de calor. Eso es lo que viene y lo que toca de ahora en adelante: el miedo por doquier.

    ¿Es grave el calor? Puede serlo, claro, tan grave como puede ser el frío. ¿Es algo nuevo en las Españas en el mes de agosto? No, en absoluto, como cantaba Labordeta: Arremójate la tripa, / que ya viene la calor; / que luego en el mes de agosto, /  no suelta el agua ni Dios. Lo que sí es nuevo es el uso y abuso sistemático del comodín del cambio climático como justificación de restricciones de movilidad, cierre de jardines y parques públicos, limitaciones energéticas y demás mandangas y pejigueras gubernamentales que pretenden que nos resignemos a vivir en estado de excepción permanente, emergencia y crisis bajo la protección paternalista del Estado y sus varias agencias estatales. No les bastaba con la meteorológica (AEMET) que ya acaban de crear otra en el reino: la de Salud Pública (AESAP).

   

  Lo que hace unos años, cuando yo era mucho más joven que ahora, era una buena noticia meteorológica del afable hombre del tiempo ("se espera para mañana un día espléndido y soleado en toda la península") es ahora una amenaza apocalíptica de muerte, porque, ante todo, según cacarea el Ministerio de Sanidad, haciéndose eco del sistema MoMo del Instituto de Salud Carlos III, el Calentamiento Global, que demuestra su existencia enviándonos olas de calor mortíferas, ha causado un total de 1.180 fallecimientos atribuidos al calor abrasivo en el período comprendido entre el 16 de mayo y el 13 de julio del año del Señor de 2025El Cambio Climático mata a través de las periódicas olas de calor, que son las plagas climatológicas del castigo divino por nuestro impenitente pecado original, lo que viene acompañado de minucias como incendios forestales varios, trastornos mentales y déficits de inteligencia natural para entender las cosas que nos pasan.