viernes, 4 de julio de 2025
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lunes, 18 de abril de 2022
Zelenski, o 'il dolce stil novo' de liderazgo
Aparte de la guerra que tiene lugar en el campo de batalla y de la que nos informan más que cumplidamente a todas las horas del día y de la noche, hay otra guerra mediática más sutil que se desarrolla en las redes sociales, una guerra en la que priman más las emociones que los razonamientos, que ya ha ganado Zelenski, una guerra decisiva para la suerte del país, Ucrania, que regenta.
Zelenski era un actor de una comedia televisiva que ha logrado captar al electorado, retrasmitiendo la guerra en vivo y en directo, en streaming, por decirlo en la lengua del Imperio. Su rival, el zar del kremlin moscovita, comparado con él, resulta distante y frío. El actor ucraniano, sin embargo, llega enseguida, aunque sólo fuera por su torpe aliño indumentario, como decía Machado, vestido muchas veces de faena y a veces sin afeitar, con cara de sueño atrasado, lo que provoca una respuesta emotiva de simpatía hacia alguien tan cercano que interpreta muy bien su papel de víctima, lo que hace que aumente la corriente de empatía hacia su causa, la causa de un David que se enfrenta a un gigantesco Goliath.
Mientras los ucranianos se visten como Zelenski, los rusos, herederos del imperio zarista y de su heredero sucesor el soviético, parecen unos burócratas desalmados. Zelenski, además, ejerce un liderazgo de nuevo cuño, a diferencia del zar del Kremlin moscovita. No parece un presidente de un gobierno al uso. No parece un político, un jefe de Estado, sino un civil, un hombre del pueblo, alguien muy cercano. Apenas se le ve con traje y corbata en las muchas imágenes que de él proliferan por la red, sino vestido como cualquiera de nosotros, muy cercano, pero eso no quiere decir que no cuide, como actor que es, no sé si bueno o malo, su imagen propia, no poco estudiada. A fin de cuentas, buen o mal actor, no deja de ser un actor muy consciente del papel que desempeña en el teatro del mundo.
Una guerra tan devastadora y brual como la que se libra en el suelo ucraniano contra el invasor ruso no le impide a Zelenski, por ejemplo, organizar visitas guiadas, mirando sonriente a la cámara, a políticos que saludan a los medios, como el primer ministro británico.
lunes, 29 de marzo de 2021
Jefe o jefa ¿qué importa?
La palabra jefe entró en castellano según Corominas a mediados del siglo XVII como préstamo del francés chef, que a su vez deriva del latín CAPVT CAPITIS cabeza de donde ya teníamos en castellano "cabo" y "capitán" y "capataz", y en italiano "capo". A partir de 1843 está documentado en nuestra lengua su femenino "jefa".
Fuera del ámbito militar, tener un jefe o una jefa es algo que comienza a estar mal visto, cuando es una característica de todas las personas que trabajan por cuenta ajena, o propia, si son sus propios jefes o jefas. Últimamente se habla mucho de que el jefe (boss en la lengua del Imperio) debe tratar de ser un líder (leader, que es anglicismo). ¿En qué consiste eso? Se supone que en ser empático, comunicador, en no mandar, sino en conseguir que sus subordinados hagan las cosas sin necesidad de que se les ordene cómo y cuándo hay que hacerlas, tan motivados que se identifiquen con la empresa y sean capaces de sacarla adelante, en un estado de total felicidad.
Hay que huir del jefe a la vieja usanza, autoritario, que sólo sabe dar órdenes. El moderno jefe ha de procurar ser uno más, un compañero y amigo, agradable, que no dice una palabra más alta que otra, un líder carismático que ejerce una jefatura trasformadora o liderazgo transformacional (vil traducción de transformational leadership en la lengua del Imperio), el nuevo estilo que tiene como objetivo influir positivamente en las forma de ser o actuar de las personas subordinadas -“personas subordinadas” es término inclusivo y políticamente correcto en lugar de “subordinados”-, logrando que el equipo -idem- trabaje con entusiasmo hacia el logro de sus metas. Esta tendencia, no poco patética, no deja de ser el viejo cuento del lobo que aclara la voz y enseña por la puerta la patita enharinada a los cabritos para hacerse pasar por mamá cabra...