La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico de las Españas, ahí es nada el titulito del cargo ministerial, cuyo nombre propio omito por delicadeza como de costumbre, ha sido objeto de la sátira mordaz de un programa de la televisión australiana, que la pone como ejemplo de hipocresía climática porque llega en bicicleta, promoviendo el ejemplo de su uso, a un encuentro de los ministros de medioambiente y energía de la Unión Europea que previamente había organizado en Valladolid, pero sólo lo hace cien metros antes de la sede donde se celebra el evento...
Se dijo, y la televisión australiana recoge el bulo, que previamente había viajado de la capital del reino a la del Pisuerga en un jet -se supone que en un Falcon que se había visto merodeando por los cielos vallisoletanos. Su Ministerio tuvo que desmentir enseguida que hubiera utilizado un
Falcon para trasladarse a Valladolid, que no llega a
distar doscientos quilómetros de la capital del reino, diciendo que utilizó el
AVE, el tren de Alta Velocidad Española, que hace ese recorrido en una
hora escasa. Eso fue el 9 de julio, pero dos días después, el 11 de julio, el Ministerio se desdijo y admitió que la vicepresidenta tercera había viajado en coche a Valladolid, pero el resto de la delegación lo había hecho en tren, que es más ecológico.
El postureo de la vicepresidenta tercera y patatín y patatán del gobierno de las Españas resulta hiriente e insultante: hizo acto de presencia montada a lomos de una flamante bicicleta eléctrica, que habían sacado del coche oficial, sin casco, luciendo sus cabellos al viento, siendo precedida y seguida por sendos coches oficiales.
El hecho de haber viajado con varios autos oficiales -se supone que eléctricos- hasta Valladolid para luego hacer un recorrido de unos metros en bicicleta y predicar con el ejemplo, resulta bastante hipócrita como dice el locutor australiano, sobre todo cuando en esa reunión, la ministra apremió a los veintisiete a llegar a un acuerdo «cuanto antes» respecto a la propuesta de normativa “Euro7”, dirigida a la descarbonización del sector automovilístico. Entiendo yo que se refiere con lo de “descarbonización” a la sustitución de los viejos autos por automóviles eléctricos, la reconversión del viejo parque automovilístico. O como dice su Ministerio: Estrategia a largo plazo para una economía española, moderna, competitiva y climáticamente neutra en 2050. Transición ecológica que no es más que transición económica -que no quiere decir "barata" precisamente, sino impuesta por el Mercado.
Además, la bicicleta es más ecológica que el automóvil, por supuesto, pero la bicicleta de toda la vida, impulsada por el propio pedaleo, no la que necesita energía eléctrica para moverse...
No se puede pretender que la tomen a una en serio, cuando ni siquiera se la ve muy ducha en el manejo del velocípedo, pedaleando inútil- y patéticamente al revés, lo que demuestra que no utiliza ese medio de transporte a menudo.
La Vicepresidenta tercera no entiende que "ofenda" utilizar la bicicleta para desplazarse. Yo creo que la que no ha entendido la cosa es ella: no ofende la bicicleta, lo que ofende es que ella haga una cosa y predique la contraria. Su intención de que se viera que predica con el ejemplo quedó empañada cuando algunos peatones grabaron el pedaleo de la ministra en sentido contrario al de la marcha precedido por un automóvil de su seguridad y seguido por un segundo coche del que una persona de su equipo, con medio cuerpo fuera de la ventanilla, grababa tan espectaculares imágenes.