(La siesta del fauno)
No despiertes a Pan cuando sestea plácido.
Se enfurece y de cólera se hincha y rabiosa ira,
resucita el cabrón fiero sembrando el pánico
y estremece espantando faunos del bosque y ninfas.
oOo
(Democracia)
Epigrama estrambótico de una cuestión retórica
sin respuesta que valga, que es, además, retruécano;
de honoríficas salvas gasta el cañón la pólvora:
¿Quien gobierna a la gente cuando gobierna el pueblo?
oOo
(Pedagogía)
Mira, voy a leerte yo la cartilla a voces
y el moderno Catón: letra sin sangre no entra.
Ya
lo dijo Machado: ¿Un pedagogo? Herodes.
No hay adulto sin niño muerto cargando a cuestas.
oOo
(El sátiro pedófilo)
No corrió tras las ninfas lícitas, itifálico;
prefirió el merodeo, cual pederasta sátiro,
de gimnasios, billares, públicos urinarios
donde los mozalbetes hacen del viejo escarnio.
oOo
Viejo grillo, que cantas con soniquete agudo,
percutiendo dorados élitros. Me despierta
tu monótono canto que hace volver al mundo
otros cánticos de otros grillos que me desvelan.
oOo
En mitad del camino de este dantesco infierno
me hallo en el laberinto, sin encontrar salida,
sin Virgilio y sin una triste esperanza, y negro
ando bajo la sola noche a través de sombras.