sábado, 7 de junio de 2025

A la contra (y II)

     Si hay gente que no se conforma con los videojuegos bélicos y necesita desfogarse disparándose y librando batallitas en la vida real, debería usar artefactos de juguete o armas blancas curioso adjetivo que las blanquea no letales para proteger sobre todo a las víctimas colaterales que no quieren que las maten. 

  
     No hay que olvidar, que para desahogarse y confrontarse con los demás existe el deporte competitivo, una excelente válvula de escape, que además da pábulo a los medios de información estupefaciente, garantizando la paz mediante el rendimiento físico y las reglas universales del deporte, aunque esto, nos tememos, no es suficiente para alimentar la voracidad de la industria armamentista que junto con la farmacéutica gobiernan. 
 
    Hay Estados que poseen muchas industrias de armamento que generan y facturan muchos millones de monises al mes y que matemática, estratégica y financieramente no tienen ningún interés en el desarme, por lo que fomentan el rearme y apuntan a incrementar el gasto en Defensa, con D mayúscula de Dios.
 
    Son empresas que dan, además, empleos directos o indirectos a muchos miles y millones de trabajadores, que podrían, es verdad, reciclarse profesionalmente nunca es tarde para desaprender un oficio y aprender otros si hace falta, no estaría nada mal, mucho mejor, dejar de trabajar, que, el trabajo, como se sabe, no es ninguna bendición de Dios, no nos engañemos, sino todo lo contrario: la maldición de una esclavitud. 
 
    Lógicamente —y sabemos que la lógica no basta para quienes se interesan por lo que no lo es— las armas de fuego deberían prohibirse igual que las drogas sintéticas, por ejemplo. A menos que decidamos legalizar las drogas sintéticas, argumentaría alguno, que no estaría mal, si no fuera porque no hace falta, dado que ya están parcialmente comercializadas: producidas por los grandes grupos farmacéuticos —Sanofi, Bayer, Pfizer, Servier, etc.—, recetadas sistemáticamente por médicos y consumidas inocentemente como "medicamentos" (¡otra estafa semántica!) por clientes/pacientes viejos, convierten a nuestros países en residencias de ancianos drogadictos...  
 

     Traicionados en numerosas ocasiones por nuestros líderes bajo la presión de los grupos de presión los que mandan son los más mandados-, no vamos a dedicarnos a defender la paz -que ese es el argumento de los gobiernos y sus respectivos ministerios de Defensa llamados de la Guerra, cuando a las cosas se las llamaba por su nombre: al pan, pan y al vino, vino; y además, hay paces como la de los cementerios y la imperial que no parecen muy atractivas ni deseables, la no violencia o el irenismo irene es el nombre de la paz en griego sino a combatir la guerra: desmilitaricémonos. 
 
    Repitámoslo una vez más: si civil se opone a militar, civilizado es lo contrario de militarizado. Civilicémonos un poco más desmilitarizándonos y desarmándonos. Desmilitarizar el mundo también significa desideologizar sistemas y mentes. Deshacerse de creencias, naciones y banderas. Como escribía aquel joven Savater juventud, divino tesoro, que cantó Rubén en “Las razones del militarismo” (1984): “Hoy todavía se nos presenta como el mayor mérito de las banderas el que mucha gente ha dado su vida por ellas y pocos se atreven a ver precisamente ahí la mejor razón para detestarlas”. El verdadero patriotismo consiste en odiar las patrias, todas y cada una, las grandes y las chicas, empezando por la propia de uno.

viernes, 6 de junio de 2025

A la contra (I)

    ¿Son defensivas las armas con las que pretenden (re)armarnos y solo sirven para protegernos, como predica la Excelentísima Señora Ministra de Defensa perdón por el eufemismo del Gobierno progresista de las Españas de Dios? ¿Lo dice ella de verdad porque es lo que verdaderamente piensa, o lo dice, más bien, porque, dada la carga de su cargo, no puede decir otra cosa más que esa, ya que le pagan para que diga eso precisamente, que es lo que está mandado desde las altas instancias que se diga, y no lo que cualquiera diría, incluida ella misma, si la dejaran y se dejara pensar y sentir lo que le sale de abajo y de sus adentros? 
 
 
     ¿Defenderse, además, de qué? ¿De quién? ¿De la gente que se defiende de las agresiones de la gente que se defiende de la gente que se defiende... entrando en un bucle sin fin? ¿No será que solo son defensivas nuestras armas y ofensivas las de los demás y que por eso mismo las de los otros, siendo defensivas como las nuestras, nos ofenden y nos obligan a defendernos? 
 
    Recordemos, haciéndole un hueco a la poesía en medio de tanta prosa, la oda de Horacio (1.22) en estrofas sáficas sobre lo innecesario de las armas en medio de parajes llenos de peligros, incluido el viejo lobo que luego aparecerá en los cuentos infantiles para asustar a los niños al grito de que viene el lobo: El de vida honrado y de crimen libre / no precisa lanzas moriscas ni arco / ni cargada aljaba de emponzoñadas, Fusco, saetas, // si es que por las tórridas Sirtes ruta / va a seguir o el Cáucaso desabrido, / o por campos que con su lengua Hidaspes, mítico, lame. // Que de mí huyó en bosque sabino un lobo, / al cantar a Lálage amada,  yendo / lejos de mis lindes y descuidado yo y desarmado, // monstruo cual ni bélica Apulia en vastos / encinares cría ni a luz engendra / la nación de Juba, de mil leones árida madre. // Ponme en fríos páramos donde brisa / veraniega a árbol ninguno alegra, / en rincón del mundo que niebla y cielo avieso castigan; // ponme bajo el carro de un muy cercano / Sol, en una tierra negada al hombre; /amaré a mi Lálage que habla dulce, dulce que ríe.  
 
    En el siguiente vídeo se canta la oda horaciana en versión original para que se oiga como sonaba: 
 
  
    ¿Son disuasorias las armas? Pueden disuadir al enemigo, pero a nosotros nos persuaden a usarlas en primer lugar como amenaza, y en segunda y no menos importante instancia, cuando la amenaza no basta, empleándolas efectivamente. Y ya se sabe que, como dice la gente, las armas las carga el diablo. ¿Cómo algo que está destinado para matar va a desistir de su propósito? No son, pues, disuasorias las armas sino persuasorias: si nadie estuviera armado, nadie tendría nada que temer de los demás.
 
     Las armas se fabrican para venderse. Y se compran para usarse. Y las armas, en la práctica, sirven para matar, y es lo que hacen: matan. A miles de millares, a millones, a lo largo y ancho de la Historia universal. Una y otra vez. 

     Un aforismo romano decía: Cedant arma togae: Que cedan las armas a la toga, es decir, que el poder militar se someta al político, pero lo que hemos aprendido es que debajo de las togas están ocultas las dagas, es decir, que el poder político no se sostiene sin la fuerza de las armas. Que se lo pregunten a Julio César que en las idus de marzo del año 44 antes del Cristo fue acuchillado por los senadores  que ocultaban sus puñales bajo las togas.
 
 
 'Acción humanitaria en misión de paz'
 
    La guerra es un mercado. Un pasatiempo mórbido y subvencionado. Más allá del engaño semántico de la «Defensa» (con D mayúscula, como Dios, y justificada con el epíteto de 'legítima'), hablamos de asesinatos masivos autorizados.   
 
    Con frecuencia oímos a seres adultos aparentemente normales entusiasmarse como niños subnormales con juguetes bélicos: misiles, drones, tanques, aviones, artefactos nucleares y demás — de tal o cual país. ¿Cuál es la edad mental de esta gente? ¿Creen sinceramente que estamos condenados a matarnos entre nosotros para siempre? En cuanto a quienes disfrutan viendo desfilar a jóvenes sumisos fusil en ristre, listos para ser inmolados en aras de la Patria, o de cualquier otra idea dulce et decorum est pro Idea mori ¿qué podemos decir si no es aquello que cantaba Paco Ibáñez versionando a Brassens de que "cuando la fiesta nacional, / yo me quedo en la cama igual, / que la música militar / nunca me supo levantar"?

jueves, 5 de junio de 2025

Pareceres LXXVII

376.- Aniversario de un Estado. Pocas veces puede determinarse con exactitud el día, mes y año de la fecha del nacimiento de un Estado como en el caso de Israel, que fue el 14 de mayo de 1948. El gran Eduardo Galeano nos habla de lo que sucedió al poco de su fundación: “Pocos meses después, ya había más de ochocientos mil palestinos expulsados, y más de quinientas aldeas demolidas”. Con la magia de las palabras Galeano resucita esas aldeas muertas sin nombre: “Esas aldeas, donde crecían los olivos, las higueras, los almendros y los árboles frutales, yacen sepultadas bajo las autopistas, los centros comerciales y los parques de diversiones”. Sus palabras hacen que revivan efectivamente en nuestra imaginación esas aldeas para,  a continuación, darles un baño de realidad y enterrarlas bajo autopistas, centros comerciales y parques temáticos, apareciendo nuevos nombres para rebautizar el mapa. Prosigue Galeano: “Ya poca Palestina queda. La implacable devoración del mapa invoca títulos de propiedad, generosamente otorgados por la Biblia, y se justifica por los dos mil años de persecución que el pueblo judío sufrió”. Y concluye: “La cacería de judíos fue, siempre, una costumbre europea; pero los palestinos pagan esa deuda ajena”. Se ha dicho muchas veces que la víctima se convierte en verdugo invirtiéndose los papeles. No es solo cuestión de que pase el tiempo: es una cuestión de dialéctica hegeliana.
 

377.- Hombres de poca fe. Reivindicar ese título no es un blasón de infamia, sino todo lo contrario: una descripción de la que no hay ni que enorgullecerse ni avergonzarse mucho tampoco. Declarando y asumiendo, pues, que somos gentes de poca fe, no tenemos muchos motivos para creer, por no decir que no tenemos ninguno en absoluto. Hay que tener fe en algo, dicen sin embargo los evangelistas del orden establecido en el estado en el que estamos (statu quo), porque la fe en lo que somos es lo único que sostiene el entramado insostenible del tinglado esencialmente ontológico e inestable en el que estamos inmersos. Desprovistos de la virtud teológica, no creemos en el Hombre con mayúscula ni en la Humanidad, que son reencarnaciones de Dios, como dicen los que han divinizado al homo sapiens-que-no-sabe-nada-y-no-tiene-el-coraje-de-reconocerlo ni, mucho menos, en nosotros mismos. Simplemente no tenemos la mucha fe que hay que tener en la realidad, nuestra cruz, para sostenerla, lo que no nos da motivos por otra parte ni para ser ni pesimistas ni optimistas.  
 

378.- Normalizando anomalías. El hecho de que se hayan considerado más graves de lo que eran gripes, catarros, resfriados y virus estacionales varios en general, y menos graves de lo que son y se hayan normalizado ictus, infartos, cánceres varios y autismos revela lo profundamente enferma y manipulada que está esta sociedad nuestra, medicalizada en exceso innecesariamente, que puede dar importancia a lo que es trivial y quitársela, sin embargo, a lo que salta a la vista que es más grave e inaudito. Hasta tal punto hemos normalizado que mueran inexplicablemente en la flor de la vida, como solía decirse, gente que no estaba previamente enferma, que ya no sabemos distinguir lo que tiene importancia de lo que no. La IA nos dice que, efectivamente, los ictus están aumentando en los jóvenes, aunque sigue siendo competencia de los mayores de 65 años. Incluso nos da el dato de que se ha observado un aumento del 25% de estos casos en personas comprendidas entre los 20 y los 64 años, y se lo achacan al aumento de la obesidad y la hipertensión, a los hábitos de vida poco saludables (tabaquismo, consumo de alcohol y drogas, falta de ejercicio físico...), estrés psicosocial, e incluso mayor diagnóstico. La multicausalidad, como se ve, pretende explicar un fenómeno que, de este modo, queda irremediablemente inexplicado, porque todas esas causas las ha habido siempre tanto o más que ahora mismo, y estas cosas no pasaban, como dice la gente a nuestro alrededor. Frente a eso, la IA normaliza el problema con afirmaciones como que el ictus no es exclusivo de personas mayores, por lo que pueden producirse en personas menores. ¿Por qué será? 

379.- Izquierda y derecha. Dicen los analistas de la política nacional carpetovetónica de la España profunda de los carpetanos y los vetones prerromanos manteniendo la necia dicotomía izquierda/derecha, que la diestra está a la que salta de la ofensiva y la siniestra, que gobierna, a la defensiva que salta. La derecha que se opone a la izquierda que gobierna dice, y es verdad, que la mafia está instalada en el Estado (=es el Estado), y que ella está dispuesta a desalojarla si se le otorga la victoria en las urnas. La izquierda, por su parte, a través de la vocera del ejecutivo, dice que la derecha, mediante la estrategia del caos, busca “verter una cascada de fango para tapar que hay un país que crece y que progresa”. Hay una batalla de relatos: el gobierno está ahí para que no esté la oposición, que es peor. Se habla de la Máquina de Fango, de las cloacas, que son el Estado Profundo, o sea el Estado mismo, es decir, los poderes fácticos. Lo que se juega, detrás de la batalla de relatos, es la toma del poder político, no nos engañemos. La izquierda acusa a la derecha de fascista porque si la acusase de lo que es, neoliberal y atlantista, como dice Diego Fusaro, se acusaría a sí misma también; y si la derecha dejase de acusar a la izquierda de comunista y la acusase de atlantista y neoliberal, estaría retratándose patéticamente a sí misma. Derecha e izquierda, conviene repetirlo porque se nos olvida a menudo, son expresiones aparentemente contrapuestas de lo mismo: del capitalismo y del imperialismo, del capital y del Estado. 
 
380.- Fraude electoral. El ministro de transportes del gobierno progresista de las Españas, perteneciente al Partido ¿Socialista? ¿Obrero? Español ha reprendido al portavoz del Partido ¿Popular? reprochándole que sus principios estén, con una imagen propia de costurero, "a la altura del dobladillo del pantalón” por haber difundido la teoría conspirativa de que hubo fraude electoral en las últimas elecciones generales celebradas en julio de 2023, cuando están los datos según las agencias verificadoras avalados sin fisuras por los organismos competentes. Si utilizamos la definición más comúnmente aceptada, el fraude electoral es la alteración de la voluntad individual o colectiva de los electores. Podría deberse, dentro de una amplísima casuística, a compra de votos, a la adulteración de las actas modificando los resultados, a la manipulación electrónica de los datos o del voto por correo, al soborno de quienes computan los sufragios, a votos de personas fallecidas... y a mil causas más que no vienen al caso. Pero todos estos supuestos parten del convencimiento de que el voto es la expresión de una voluntad individual que sabe lo que quiere y que, por la suma de otras individualidades, se convierte en colectiva y se impone por mayoría que no por mejoría a toda la población. ¿Hubo fraude electoral en los pasados comicios? Por supuesto, porque todas las elecciones son un engaño fraudulento. El auténtico fraude electoral o pucherazo que se produce en todos y cada uno de los procesos democráticos es reducir la voluntad al voto, el pueblo a la condición de electorado que cree saber lo que le conviene, cuando lo que le conviene es otra cosa -porque como dijo Jesucristo en la cruz, y son divinas palabras, que diría Valle-Inclán: Pater, dimitte illis; non enim nesciunt quid faciunt ('Padre, perdónalos porque no saben lo que hacen'). No saben, en efecto, lo que votan.

miércoles, 4 de junio de 2025

Formación del Espíritu Nacional

Una nueva variante del coronavirus se propaga según la OMS por el mundo. ¿Hay que acaparar, como antaño, papel higiénico, enmascararse, confinarse y jeringarse? 

El primer ministro británico declara que el objetivo principal de sus (nuestras, dice) fuerzas armadas es avanzar en warfigthing (preparación para la guerra).

En su trono de oro macizo de valor histórico y artístico incalculable (unos treinta millones de dólares) el Santo Padre reza por los niños hambrientos gazatíes. 

 

 Hemos normalizado que vejez es sinónimo de enfermedad, por lo que hay que atiborrarse de pastillas de casi todo y acabar, ay, pudriéndose uno en una residencia.

Apolo le concedió a la Sibila de Cumas la inmortalidad que le pidió, pero, siendo inmortal, envejecía sin fin porque había olvidado pedirle la eterna juventud. 

La utilidad de un chequeo general anual no es el fomento de nuestra salud, sino, muy al contrario, la provocación de la enfermedad, cuya presencia se conjura. 

La gorra con el eslogan Make America Great Again que lleva el presidente yanqui y su numeroso séquito de club de fans está hecha en China, igual que casi todo. 

 Los medios necesitan fabricar nuevos contenidos, noticias que den pábulo al consumo publicitario. A falta de novedades, recurren a reposiciones de los clásicos. 

El televisor hegemónico que presidía el salón familiar se ha sustituido entre las nuevas generaciones por la micropantalla de su móvil personal intransferible.

Los únicos seres mortales que hay en el mundo, excluidos animales y niños, somos los humanos adultos, que sabemos -saber es nuestra condena- que vamos a morir. 

Si la burocracia es el poder político de la administración del Estado sobre la vida de la gente, bulocracia es el gobierno efectivo del embuste, su instrumento.

 En Gaza se está produciendo una matanza que los medios retransmiten noche y día en tiempo real con imágenes truculentas y puntual informe del número de muertos. 

 El sionismo presenta a los palestinos como antisemitas, cuando quiere decir antisionistas: los ha deshumanizado convirtiéndolos a todos al fin en terroristas. 

¿Puede explicarse por qué hay una alerta alarmante ante la emergencia de la “peor ola de calor de la Historia desde que hay registros” a las puertas del verano? 
 
 Israel no es la patria del pueblo judío sino un Estado criminal que legitima la ocupación de un territorio como metáfora viva de un tumor cancerígeno maligno.
 
Israel usa contra los palestinos la misma lógica criminal que usaron los nazis contra los judíos, gracias a la que las víctimas se comportan como sus verdugos. 
 
Todos los Estados se ven reflejados en el matonismo y espíritu de legítima defensa que esgrime el democida de Israel, que nunca disimuló su carácter criminal. 
 
El Ministerio de Sanidad endurece las medidas contra el tabaco que se despacha en los estancos demonizándolo y restringiéndolo a la intimidad de los retretes.
  El judaísmo, como el islam, es sumisión a la voluntad divina, mientras que el sionismo, por el contrario, es nacionalismo armado, furioso, fatal y exacerbado.
 
El sionismo reemplaza la identidad espiritual, digamos, del maltrecho pueblo judío por una identidad nacional y, por lo tanto, lo peor que hay, nacionalista. 
 
Los sionistas usan el sufrimiento del Holocausto para justificar, silenciando la crítica política y religiosa, la creación del Estado holocáustico de Israel.
 
En la escuela se impartía Historia Sagrada. En el Instituto, la Historia se secularizó y se convirtió en una nueva asignatura: Formación del Espíritu Nacional.

martes, 3 de junio de 2025

A vueltas con el chocho

    El libro 1724 Birth of the Cunt ('1724 Nacimiento del Coño') de Jason Rhoades (1965-2006) es una obra provocadora y conceptual que acompañaba a su instalación My Madinah, in pursuit of my ermitage. ('Mi Medina, en busca de mi retiro espiritual'), presentada en una galería de arte en Suiza en 2004. Esta instalación fue concebida por el artista como una especie de mezquita contemporánea, un espacio de contemplación no dedicado a una deidad, sino al cuerpo femenino en general y en particular a la vulva, para el retiro espiritual. La instalación incluía aproximadamente 240 letreros de neón que mostraban términos en jerga para referirse al coño tales como "Satan’s cave", "magic handbag" y "yoyo smuggle", colgados sobre un suelo cubierto de toallas baratas, que evocaban alfombras para la oración, creando una atmósfera que mezclaba lo sagrado y lo profano. 
   El libro, por su parte, recopilaba 1724 sinónimos en inglés básicamente estadounidense del término "vulva" ordenados alfabéticamente. Más que un libro al uso se trata de un objeto artístico para lectura táctil, con un diseño que incluye una encuadernación en piel de cordero y una caja de lino. Se publicaron 172 ejemplares numerados y firmados por Rhoades -la firma del artista le confiere al objeto la categoría de obra de arte, estableciendo su culto-, junto con 4 ediciones especiales con encuadernación en forma de cojín, integradas en la instalación que hemos mencionado. Esta obra se inscribe en la práctica del artista, caracterizada por instalaciones a gran escala que combinan escultura, lenguaje y crítica cultural. 
 
    1724 Birth of the Cunt es una reflexión sobre cómo la sociedad moderna y contemporánea a través del lenguaje, que refleja y perpetúa estructuras de poder, censura el sexo femenino. Dada su rareza y valor artístico, ha sido objeto de subastas y es considerado una pieza destacada entre los coleccionistas de libros de artista, habiendo sido tasado entre los setecientos y los mil dólares estadounidenses. 
 
    El libro incluye una introducción a modo de prólogo de Gianfranco Sanguinetti (1948-...) en francés e inglés simultáneamente (La chatte, hier et aujourd'hui y The pussy -past and present), cuya traducción castellana presentamos en exclusiva, creemos, en página adjunta aquí, titulada El coño, ayer y hoy, donde Sanguinetti analiza cómo la censura ha acompañado a la apropiación del sexo femenino por la economía y la política actuales. 
 
    Comento de pasada aquí cómo en francés el femenino de chat ('gato'), chatte se convirtió en la forma habitual, familiar y coloquial, desde el siglo XVII de referirse al sexo femenino, de forma que ya no significa 'gata' como en su origen sino 'coño', como en el título de Sanguinetti, mientras que 'gata' se dice ahora chat femelle ('gato hembra') en la lengua de Molière. 
       Curioso, por otra parte, resulta el significado de la cifra 1724, que por un lado es el año del nacimiento del filósofo Immanuel Kant, que en la historia de la filosofía representa -especialmente por su obra Crítica de la razón pura- el pensamiento racional y fundacional de la Ilustración moderna, que excluyó el sexo femenino, y resulta significativamente irónico que Rhoades haya encontrado 1724 sinónimos nada más y nada menos que del coño. 
 
    Si 1724 fue el nacimiento del pensamiento moderno, también puede ser una fecha imaginaria para señalar el inicio de la censura sistemática del chocho en el lenguaje y la cultura racionalista occidental. El título del libro nos pone además sobre la pista de que en 1724 nació algo más ('birth'). Y es que hay una curiosa homofonía, podría decirse, entre la pronunciación del apellido del filósofo Kant (/kɑːnt/) y el nombre del coño 'cunt' (/kʌnt/), donde ambas vocales se distinguen pero con una diferencia tan sutil que en algunos acentos de la lengua del Imperio y en lenguaje relajado pueden sonar igual prácticamente. El libro artístico de Rhoades contiene en la última sección precisamente una reproducción fotográfica del cráneo del Emmanuel Kant, de manera que 1724 se puede considerar el año de nacimiento del filósofo racionalista por excelencia, y de la censura del coño, que se oculta paradójicamente detrás de sus muchas denominaciones simbólicas, metafóricas y figuradas, a propósito de lo cual resulta interesante también recordar el soneto de Giuseppe-Gioachino Belli, que exploraba alguno de esos sinónimos antiguos en italiano, faltando el que ahora es más habitual en el italiano oficial contemporáneo, que es 'la gnocca': La madre de las santas

lunes, 2 de junio de 2025

Micropoemas

Jaicus (o jaicús) 
 La rana croó, / dio un salto y se sumergió / en el lodazal.

Me iría de aquí, / si no es porque voy a estar / allá donde vaya.
 
 Palabras obreras, / y, dicho al revés, también: / obras palabreras.

¿Por qué hay que sacar / siempre alguna conclusión / como colofón?

 La voz interior / del socrático demón / calla o diz que no.

Cavernícolas / en la cueva de Platón, / la realidad.

Cautivo en prisión, / en celda del corredor / de una muerte atroz. 

¿Comete Israel / crímenes de guerra en Gaza? / La guerra es el crimen.

Un ménage à trois: / No somos dos, sino tres. / Tú, yo, y nuestro amor.

Es el celular / nuestra personalidad: / ánima inmortal.

La realidad / no puede ser lo que ya es: / imposible, pues.

 Lenguas de Babel: / muchas formas de decir / nunca la verdad. 
  
 Tancas: 
Es universal / ya la pena capital / en el mundo actual: / condenados a existir, / que es lo mismo que morir. 

O ganas o pierdes / si juegas; una de dos. / Pero no es verdad: / puedes perdiendo ganar, / ganando puedes perder.

El mirlo cantor / entonaba su canción, / canto encantador: / poesía musical / sin nombre propio de autor. 
 
 ¿Dónde estaba yo, / solo por curiosidad, / antes de nacer? / ¿Dónde ahora mismo estoy? / Cuando muera, ¿a dónde voy? 
 
El futuro es hoy, / ya ha venido el porvenir, / ya llegó, está aquí: / propaganda electoral, / nada menos, nada más.

 Tiene cada cual / su culo, que es su opinión: / llévalo a concejo: / unos te dirán que blanco / y otros dirán que bermejo.
 
Goliardescas 
Ya lo veo, / ya lo creo, / porque es lo que hay que creer: / un futuro / prematuro / y no hay nada más que ver. 

Diferida / fue la vida / a un presunto porvenir / sostenible / y terrible,/ que tenemos que sufrir. 

  Yo no quiero / ser yo mismo / ni existir, que es padecer. / Soy un cero, / no un guarismo, / a la izquierda y a placer. 

¿Más Europa? / Toma estopa, / y cuanto peor, mejor. / Marcha en bloque / hoy a toque / y a redoble de tambor. 
Solo existe / -no es un chiste- / lo que puede ver usted / divulgado / y amueblado / en la nube tras la Red. 

Habanera: 
Por ti me olvidé de Dios, / la gloria eterna perdí ; / y ahora me quedo al fin, / sin Dios, sin gloria y sin ti.


domingo, 1 de junio de 2025

A la tercera va la vencida.

    La impresentable presidenta que regenta la Unión Europea ha recibido el premio Carlomagno 2025, el máximo galardón del viejo continente para quienes como ella promueven los devaluados valores europeos: una defensa ofensiva, mayor innovación tecnológica -¡lo que nos faltaba!-, ampliación de la UE a nuevos miembros -más Una, más Grande, más Libre-, y la protección de la democracia -no faltaba más, la democracia es la perfección ideal del Régimen- y de la resiliencia, que es el nombre secular de la vieja resignación cristiana. 
 
    La lógica implacable del lenguaje orgüeliano se ha implantado en el discurso político europeo en la lengua del Imperio, of course, que ya no es el latín, sino el inglés. Según dicha lógica, war is peace,  la guerra es el camino hacia la paz -si uis pacem, para bellum, que decían los romanos, y así les fue- mientras que la paz es solo una tregua para preparar la guerra, que es el objetivo de toda política que se precie, por aquello de aquel barón y militar prusiano de que la política no es más que la continuación de la guerra por otros medios (no menos violentos al fin y a la postre), y, podemos añadir nosotros, viceversa, la guerra no es solo la continuación de la política, sino el acto esencialmente político que fundamenta el dominio del Estado sobre el pueblo. 
 
     Los europeos nos hemos visto embarcados de la noche a la mañana en un buque pilotado por unos gobernantes que cual caballeros medievales pretenden “hacer sangrar a Rusia”, con el declarado pretexto de salvar a la princesa que es Ucrania atacada por el dragón, que es Rusia,  para lo que es preciso no solo armarse de valor, sino además de armas de destrucción masiva, no vaya a ser que la ocasión nos pille indefensos e inermes. Nos arrastran, pues, con los ojos vendados a la que ya se ha bautizado, por aquello de que no hay dos sin tres, como la tercera guerra mundial, y ya se sabe que como dice a veces la gente, a la tercera va la vencida: el desastre de un conflicto en el que todos seremos perdedores. Europa vuelve a ser raptada y arrebatada por el toro bravo de la beligerancia geoestratégica.
 

    El silencio del pueblo, de la gente, clama al cielo y resulta ensordecedor en todos los países, por no hablar de los presuntos intelectuales orgánicos, que callan como putas, lo que son. Hemos sido anestesiados, insensibilizados a fuerza de informativos telediarios. Cuando alguien levanta su voz contra el rearme enloquecido que predican, proponga o no otra cosa, porque para oponerse a algo no hace falta dar alternativas, sino decir simple- y llanamente que no, es enseguida tachado de “marioneta de Putin”, de hacerle el juego al zar ruso, que es lo que él quiere, que todos bailemos a su son. No hay matices: o estás conmigo o contra mí.
 
    Uno puede condenar la invasión rusa de Ucrania, camuflada de operación especial (militar), pero puede comprender a la vez que es la lógica consecuencia de la persistencia de una organización (militar) cancerígena como es la OTAN, calificada de defensiva, y que, lejos de disolverse cuando desapareció el Pacto de Varsovia, como hubiera sido lo esperado al no tener en frente al bloque comunista rival, siguió ampliándose y llevó su expansión, que ya es metástasis, hasta las fronteras mismas de Rusia, violando los tratados internacionales.
 

    La guerra de Ucrania, que vino a sustituir a la guerra contra el virus coronado en todas nuestras pantallas, tanto las hegemónicas del salón de casa familiar, presidido por el televisor, como las de nuestros móviles individuales, dura ya tres años; las víctimas a ambos lados superan con mucho el millón, aunque ninguno de los países enfrentados dé cifras fidedignas de muertos, heridos y mutilados. A lo que hay que añadir los millones de ucranianos -o ucranios, según el execrable Periódico Global(ista), que huyeron del país, unos a Europa Occidental, llegando algunos hasta las Españas mismas, otros a Rusia, todos ellos intentando escapar de la violencia desatada por sus democráticos gobiernos, un auténtico desastre. Y nuestros democráticos gobiernos, negándose a aceptar que, dada la desigual relación de fuerzas, la guerra está perdida, arropan al presidente ucraniano, el títere NATO de los Estados Unidos,  prometiendo el envío de más armas y dinero y hasta tropas auxiliares si hacen falta, para que el ejército de ese país siga luchando hasta el último hombre y la última mujer equiparada al hombre en el arte de la guerra. 
 
    Buen tema musical sobre manipulación mediática en el siguiente vídeo del rapero Yaco: Ucrania.
 

sábado, 31 de mayo de 2025

Coge el día

Hay que recordar la poesía de Fernando Pessoa (1888-1935), uno de cuyos heterónimos, Ricardo Reis, que anhelaba el retorno del paganismo, le debe tanto a Horacio, inspirándose, sin ningún género de duda, en la poesía clásica de sus odas. 
 
 

Afortunadamente disponemos en la red del Archivo Pessoa que nos ofrece la obra de este autor. De allí he tomado esta oda que es una recreación del tópico horaciano del "carpe diem", que Pessoa traduce literalmente al portugués como "colhe o dia" (coge el día). Otros la han vertido al castellano como goza del día (Manuel Fernández-Galiano), échale mano al día (José Luis Moralejo), coge la flor que hoy nace (anónimo), cosecha el día (Alejandro Bekes), goza el hoy (Alfonso Cuatrecasas), pilla del hoy (Agustín García Calvo), aprovecha el día (Vicente Cristóbal López), goza este (día) que se va (Miguel Antonio Caro), hoy goza (Alejandro Aráoz)... Pero la de Reis/Pessoa es sin duda la más literal: colhe o dia: coge el día
 
Uns, com os olhos postos no passado, / Vêem o que não vêem; outros, fitos / Os mesmos olhos no futuro, vêem / O que não pode ver-se.
 
Porque tão longe ir pôr o que está perto — / A segurança nossa? Este é o dia, / Esta é a hora, este o momento, isto / É quem somos, e é tudo.
 
Perene flui a interminável hora / Que nos confessa nulos. No mesmo hausto / Em que vivemos, morreremos. Colhe / O dia, porque és ele.
 

 (Unos, puesta la vista en el pasado, / ven lo que no ven; otros, con los mismos / ojos fijos en el futuro, ven / lo que no puede verse.
 
¿Por qué buscar tan lejos lo de cerca -/  nuestra seguridad? Este es el día, / esta la hora, este el momento, esto / lo que somos, y es todo.
 
Perenne fluye la hora interminable / que nos proclama nulos. En el trago / en que vivimos, moriremos. Coge / el día, porque él eres).
 
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Encuentro en el esmerado libro Fernando Pessoa: Obras completas de Ricardo Reis, publicado por Editorial Pre-textos, Valencia 2025, que incluye además de la obra en verso por primera vez en castellano textos en prosa, la siguiente traducción a cargo de Max Hidalgo Nácher, que se basa en la edición de Jerónimo Pizarro y Jorge Uribe, con dos estrofas, fusionando en una la segunda y la tercera de la versión de arriba con alguna variantes textuales en la segunda.
 
Uns, com os olhos postos no passado, /Vêem o que não vêem; outros, fitos /Os mesmos olhos no futuro, vêem / O que não póde ver-se.  

Porque tam longe ir pôr o que está perto - /O dia real que vemos? No mesmo hausto / Em que vivemos, morreremos. Colhe / O dia, porque és ele.
 
Los ojos de unos vueltos al pasado /ven lo que no ven; otros, orientando /los mismos ojos al futuro, ven /lo que no puede verse.
 
¿Por qué poner tan lejos lo cercano - /el día real que vemos? En el soplo / en que vivimos, moriremos. Coge /el día que tú eres.
 

viernes, 30 de mayo de 2025

Parada de postas V

 
 El objetivo de las noticias de los medios informativos que configuran la realidad es distraernos y atraer nuestra atención hacia espacios al fin publicitarios.
 
Una nueva variante del virus coronado cosecha 2019 se propaga rápidamente por Asia, Europa y Estados Unidos a modo de secuela o remake de un clásico de Disney.
 

Ya está operativa y actualizada convenientemente la «nueva variante y temporada» del covid-19, bautizada NB.1.8.1. Permanezcan atentos a todas sus pantallas. 
 
El vendedor de humo no solo vende algo de poca monta, sino además muy nocivo: el humo del tabaco, por ejemplo, contiene más de setenta sustancias cancerígenas.  

  
 A la pregunta del doctor sobre qué dolencia lleva al paciente a su consulta, cualquiera de nosotros como tal respondería con precisión: “Me duele la realidad”.
 
¿Qué nos duele a los españoles? Podemos responder a lo Unamuno: Nos duele España, nuestra nacionalidad, a cada cual la suya, en el cogollo de nuestro corazón.

Cuando le dijeron a Unamuno que diera su palabra de honor de caballero, dijo que su palabra de honor era de hombre honrado de a pie, de peatón, no de caballero.


La expresión “las cloacas del Estado” que acuñó un presidente del gobierno revela no que el Estado tenga cloacas, sino que es albañal o depósito de inmundicias. 
 
 
Se avecina tormenta de nivel amarillo con granizo y rachas fuertes de viento. Esté atento. Manténgase informado de la predicción meteorológica más actualizada. 
 
Hoy se espera lluvia ligera por la tarde por lo que la Agencia Estatal de Meteorología le recomienda, por salud y seguridad, llevar paraguas y ropa impermeable. 
 
Escaneando el código QR de lectura rápida en su dispositivo electrónico podrá obtener usted alertas en tiempo real e información del clima en vivo y en directo.
 
Aumenta el cáncer en personas aparentemente sanas, cada vez más jóvenes, que se cuidan y hacen deporte, ante el desconcierto médico que no llega a explicárselo.

jueves, 29 de mayo de 2025

"Se ve pero no se toca"


 El Pequeño Nicolás*: el museo de pintura.

«Entramos en el museo todos en fila, portándonos bien porque nos gusta nuestra maestra, y nos habíamos dado cuenta de que parecía muy nerviosa, como mamá cuando papá deja caer la ceniza de sus cigarrillos encima de la alfombra. Entramos en una gran sala con montones y montones de cuadros colgados en las paredes. 

-Aquí veréis cuadros realizados por los grandes maestros de la escuela flamenca, explicó la maestra. 

No pudo seguir mucho más, porque un conserje vino enseguida corriendo y gritando porque Alcestes había pasado el dedo por un cuadro para ver si la pintura estaba fresca todavía. 

El vigilante dijo que no le estaba permitido tocarlo y empezó a discutir con Alcestes, que le decía que se podía tocar porque estaba seca y no había riesgo de mancharse. 

La maestra le dijo a Alcestse que se comportara y prometió al guarda que nos vigilaría de cerca. El guarda se marchó sacudiendo la cabeza»

*El Pequeño Nicolás es una famosa serie de libros infantiles franceses creada por el guionista René Goscinny (conocido por ser el autor de Astérix y de Lucky Luke) e ilustrada por Jean-Jacques Sempé, publicada por primera vez en 1959.

 Tomado de Le Petit Nicolas® Le musée des peintures © IMAV éditions / Goscinny - Sempé

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Me ha traído a la memoria un recuerdo infantil. Sucedió hace más de cincuenta años en la cueva de Altamira, templo rupestre del arte paleolítico, en el original, cuando se podía visitar el Patrimonio Cultural de la Humanidad, no en la réplica actual. "Se ve pero no se toca", gritó como un energúmeno el guía. Estuvieron a punto de echarnos a todos... Resuenan en mí aquellas palabras: "Se ve pero no se toca". Hoy no se toca tampoco, por supuesto, pero tampoco se puede ver. En estos momentos la lista de espera para visitar la cueva original está cerrada. No se aceptan nuevas solicitudes, dice el Ministerio de Cultura de las Españas. A veces me pregunto si no será un recuerdo falso, si me pasó a mí de verdad o a algún otro que podía ser yo mismo, o quizá algún otro escolar que no fuera yo, algún amigo que me lo hubiera contado y yo me hubiera apropiado de su recuerdo, hace ya tantísimo tiempo de aquello y es la memoria histórica tan frágil...
 

miércoles, 28 de mayo de 2025

Cioran y el pesimismo griego

    Mucho antes de que Emil Cioran (1911-1995) escribiera: «No haber nacido, de solo pensarlo, ¡qué felicidad, qué libertad, qué espacio!»  -en su depurado francés: « N’être pas né, rien que d’y songer, quel bonheur, quelle liberté, quel espace!», aforismo incluido en su obra Del inconveniente de haber nacido (1973), Teógnide de Mégara había escrito en griego:

πάντων μὲν μὴ φῦναι ἐπιχθονίοισιν ἄριστον
μηδ᾽ ἐσιδεῖν αὐγὰς ὀξέος ἠελίου·
φύντα δ᾽ ὅπως ὤκιστα πύλας Ἀΐδαο περῆσαι
καὶ κεῖσθαι πολλὴν γῆν ἐπαμησάμενον. 

  Es lo mejor de todo no haber para el hombre nacido
ni llegado a ver      luz rutilante del sol;
mas, si nacido, cruzar cuanto antes las puertas del Hades
y soterrado yacer    bajo copioso montón.  
 
 

    Dos dísticos elegíacos de hexámetro y pentámetro dactílicos de Teógnide de Mégara (siglos VI-V ante), libro I de sus Elegías, versos 425-428, que expresan con asombrosa sencillez lo que se ha dado en llamar el “pesimismo griego”, fruto del sentimiento trágico que tenían de la vida como condena.
 
    No obstante, el propio Cioran reconoce su deuda con Teógnide de Mégara en el siguiente aforismo de Ese maldito yo: "De todos los clásicos, es quizás Epicuro quien mejor ha sabido despreciar a la muchedumbre. Otro motivo más para celebrarlo. ¡Qué idea la mía de haber admirado tanto a un payaso como Diógenes! Lo que yo debería haber frecuentado es el Jardín del Sabio y no el ágora ni menos aún el tonel... (Sin embargo, el mismo Epicuro me ha decpecionado más de una vez. ¿No trata de tonto a Teógnide de Mégara por haber afirmado que más valía no haber nacido o, una vez nacido, atravesar cuanto antes las puertas del Hades?)". 

    Friedrich Nietzsche (1844-1900) en El nacimiento de la tragedia en el espíritu de la música se hace eco de la leyenda mitológica que cuenta que durante mucho tiempo el rey Midas había intentado capturar  en el bosque al sabio Sileno, acompañante del cortejo de Dioniso, sin poder atraparlo. Cuando por fin cayó en sus manos, el rey, ávido de su sabiduría, le preguntó qué era lo mejor y más preferible para el hombre. Sileno callaba, hasta que apremiado por Midas a dar una respuesta, le contestó con una risa estridente:  “¿Por qué me fuerzas a decirte lo que para ti sería muy ventajoso no oír? Lo mejor de todo es totalmente inalcanzable para ti: no haber nacido, no ser, ser nada. Y lo mejor en segundo lugar es para ti -morir pronto”.